Tras describir la posibilidad de imponer sanciones adicionales contra Irán como "contraproducente", Cameron dijo que el éxito de las conversaciones nucleares con Teherán requiere "espacio para la negociación".

"Podría poner en riesgo la valiosa unidad internacional que ha sido crucial para nuestro enfoque", indicó el primer ministro británico.

Mientras los negociadores de Estados Unidos se reúnen con sus homólogos iraníes en una nueva ronda de conversaciones nucleares, la Casa Blanca y el Congreso de Estados Unidos se dirigen hacia un estancamiento sobre si se deben imponer o no sanciones adicionales contra Irán.

Hasta ahora, los legisladores estadounidenses ya terminaron una nueva iniciativa bipartidista sobre las sanciones contra Irán y el Senado busca votar sobre ella mucho antes de que la actual ronda de conversaciones nucleares internacionales termine en junio.

Por otra parte, Obama amenazó con vetar cualquier iniciativa de sanciones, lo que describió como una práctica que "vale la pena".

"El Congreso tiene que mostrar paciencia", dijo Obama en la conferencia de prensa conjunta. "Con respecto al veto, dije ayer a mis colegas del grupo demócrata que vetaré la iniciativa que llegue a mi escritorio".