EL CAIRO, 13 jul (Xinhua) -- El presidente egipcio Abdel-Fattah al-Sisi se reunió hoy con el ministro de Relaciones Exteriores de Italia, Paolo Gentiloni, y agradeció a Italia su apoyo en la guerra de Egipto contra el terrorismo, indicó el vocero presidencial Alaa Yousse.
La reunión se produce dos días después de una poderosa explosión contra el consulado italiano en el centro de El Cairo, la cual provocó la muerte de un transeúnte y causó daños masivos en el consulado y grietas en algunos edificios cercanos.
Ansar Bayt al-Madqis, grupo radicado en Sinaí que cambió su nombre a Estado del Sinaí y prometió lealtad al grupo militante regional Estado Islámico, se adjudicó la responsabilidad por el estallido en una cuenta de Twitter atribuida al grupo.
"El ministro italiano señaló que su país considera la explosión fuera del consulado italiano en El Cairo como un intento fallido de socavar los fuertes vínculos entre Egipto e Italia y enfatizó que tal incidente incrementará la fortaleza de las relaciones bilaterales entre los dos países", dijo el vocero presidencial.
Gentiloni se reunió con anterioridad con su homólogo egipcio Sameh Shukry y ambos reafirmaron los fuertes lazos entre los dos países.
"Egipto es una piedra angular para la estabilidad en la región", dijo el ministro de Relaciones Exteriores italiano a los reporteros en una conferencia de prensa conjunta con Shukry y enfatizó el apoyo de su país a la guerra egipcia contra el terrorismo.
Horas después de la explosión ocurrida el sábado afuera del consulado italiano en El Cairo, Al-Sisi recibió una llamada teléfonica del primer ministro italiano Matteo Renzi, quien expresó la solidaridad de su país con Egipto en su guerra contra el terrorismo y su interés en erradicar el terrorismo.
La explosión se produjo menos de dos semanas después del asesinato del máximo fiscal de Egipto en un ataque con auto bomba a finales de junio.
A inicios de julio, letales ataques terroristas contra varios puestos de vigilancia dejaron 17 soldados muertos en la provincia de Sinaí del Norte, en la frontera con Israel y con la Franja de Gaza palestina.
Las incursiones militares contra los militantes en la península han dejado más de 250 muertos desde entonces.
El estallido afuera del consulado es la primera actividad terrorista contra una oficina diplomática desde la destitución del ex presidente islamista Mohamed Morsi por parte del ejército a inicios de julio de 2013, luego de las protestas masivas contra su año de gobierno.
Egipto ha estado enfrentando una creciente oleada de terrorismo desde la destitución de Morsi y de las posteriores medidas severas contra sus simpatizantes, en especial contra el grupo ahora proscrito de la Hermandad Musulmana, las cuales provocaron la muerte de más de 1.000 de ellos y el arresto de miles más.
Desde entonces, autoproclamados islamistas con sede en Sinaí han realizado ataques terroristas contra policías y personal militar que han dejado cientos de muertos. Ansar Bayt al-Maqdis se ha adjudicado la responsabilidad por la mayoría de los ataques contra el gobierno.
En su informe anual emitido a finales de mayo, el Consejo Nacional para los Derechos Humanos de Egipto señaló que los actos de violencia desde la destitución de Morsi han resultado en la muerte de 2.600 personas, incluyendo 700 policías y soldados, 550 civiles y 1.250 miembros y simpatizantes de la Hermandad Musulmana.