RIAD, 12 jun (Xinhua) -- El Ministerio de Salud de Arabia Saudí anunció hoy la muerte de un saudí de 77 años de edad a causa del Síndrome Respiratorio de Oriente Medio por coronavirus (MERS, por sus siglas en inglés), lo que eleva el número de muertos a 453 desde que inició el brote de la letal enfermedad en 2012.

De acuerdo con autoridades de salud, Arabia Saudí ha informado hasta ahora de 1.030 personas contagiadas con MERS, 568 de las cuales se han recuperado, y ocho pacientes aún en tratamiento.

Arabia Saudí registró un aumento en los casos en febrero y marzo de este año por el clima cambiante y la temporada de cría de camellos, los principales sospechosos de ser portadoes del virus.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), un caso típico de contagio con MERS incluye síntomas como fiebre, tos y falta de aliento y puede conducir a neumonía e insuficiencia renal.

Por lo que saben hasta ahora los científicos, el virus es transmitido por la exposición a individuos contagiados, ya sea en instalaciones de salud como hospitales, o por contacto directo con los camellos, presuntos portadores del virus.

La OMS señaló que al parecer, la epidemia de MERS no se transmite con facilidad entre personas a menos que haya contacto cercano, lo que explica la razón por la cual hay grupos de infecciones en centros de salud, donde la transmisión entre humanos podría ser más fácil y conveniente.

A pesar del hecho de que la letal enfermedad ha existido durante años y ha causado tantas muertes, todavía no hay cura ni vacuna para el MERS. El tratamiento actual ha sido en gran medida cuidado de apoyo.

Desde el primer brote de MERS en 2012, Riad ha reemplazado en dos ocasiones a sus ministros de Salud y las autoridades de salud del país han exhortado a sus nacionales a abstenerse de consumir carne o leche de camello.

Normalmente transcurren entre cinco días y dos semanas antes de que el virus pueda generar síntomas una vez que el individuo se ha contagiado. La enfermedad podría representar un mayor riesgo de desarrollar síntomas severos del MERS en aquellos que ya tienen diabetes, afecciones cardíacas o problemas pulmonares.