MOSCU, 13 abr (Xinhua) -- El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, justificó hoy la decisión de Moscú de suspender la prohibición para suministrar a Irán sofisticados sistemas de defensa antiaérea y dijo que esto no constituye ninguna amenaza para la seguridad regional.
"La S-300 es un arma completamente defensiva. Esto no pondrá en peligro la seguridad de ningún país de la región, incluyendo a Israel", dijo Lavrov.
Puesto que se han logrado avances en las conversaciones entre Irán y los mediadores internacionales con respecto al controversial programa nuclear de Teherán, dijo el canciller, ahora el embargo de Rusia sobre sistemas defensivos es totalmente innecesario.
Lavrov negó que la decisión del Kremlin sea una violación a la resolución de 2010 del Consejo de Seguridad que prohíbe el suministro de armas convencionales a Irán.
"La resolución no prohíbe exportaciones de armamentos defensivos (a Irán)", dijo Lavrov.
Hoy con anterioridad, el presidente ruso Vladimir Putin firmó un decreto para suspender la prohibición a la venta de sistemas de defensa antiaérea S-300 a Irán.
La medida se produce después de que Irán y seis potencias mundiales, incluyendo a Rusia, llegaron a un acuerdo marco a principios de este mes sobre los parámetros del controversial programa nuclear de Irán.
Un vocero del Departamento de Estado de Estados Unidos expresó hoy la "oposición" del Pentágono a la venta y dijo que es "poco útil".
Moscú y Teherán firmaron en 2007 un contrato por 800 millones de dólares para suministrar a Irán cinco sistemas S-300.
En septiembre de 2010, el entonces presidente ruso Dmitry Medvedev canceló el contrato para cumplir con una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.