NACIONES UNIDAS, 16 feb (Xinhua) -- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, condenó hoy "en los términos más enérgicos" el asesinato de 21 cristianos coptos egipcios en Libia, y condenó "los ataques contra personas por su filiación religiosa".
Los egipcios fueron asesinados por el autoproclamado Estado Islámico de Irak y Levante, dijo el secretario general en un comunicado emitido por su vocero. "El secretario general expresa sus condolencias a las familias de quienes perdieron la vida como resultado de este acto bárbaro, así como al gobierno de Egipto".
Según informes, un video publicado la noche del domingo muestra la decapitación masiva de 21 cristianos secuestrados en Libia.
El video de cinco minutos de duración fue grabado de manera similar a los videos previos que muestran los asesinatos de prisioneros occidentales por parte del Estado Islámico de Irak y Siria, un grupo armado que invadió gran parte de Irak y Siria el año pasado, agregaron los informes.
"El secretario general reafirma que el diálogo ahora en curso en Libia es la mejor oportunidad para ayudar a ese país a superar su actual crisis", agregó la declaración.
"Sólo a través del diálogo podrán los libios construir un Estado y las instituciones que puedan enfrentar el terrorismo", añadió Ban.
El domingo por la noche, el Consejo de Seguridad de la ONU condenó el "atroz" asesinato de 21 cristianos egipcios por parte del grupo militante Estado Islámico en Libia.
"Este crimen muestra una vez más la brutalidad del EI, responsable de miles de delitos y abusos contra gente de todas las creencias, etnias y nacionalidades, sin consideración por ningún valor básico de humanidad", indicó el consejo de 15 países en un boletín de prensa.
Por otra parte, el Consejo de Seguridad exigió la liberación inmediata, segura e incondicional de todos aquellos mantenidos como rehenes por el EI y por individuos, grupos, empresas y entidades asociadas con Al Qaeda.
Además de pedir a todos los Estados cooperar con Libia para presentar ante la justicia a los responsables de estos actos, el consejo también exhortó a todas las partes en Libia a participar de manera constructiva en los esfuerzos encaminados a continuar con un proceso político inclusivo para abordar los desafíos políticos y de seguridad que enfrenta el país.
"Los miembros del consejo subrayaron que sólo a través de la unidad nacional y del diálogo, con el fin de encontrar una solución pacífica, podrán los libios construir su Estado y sus instituciones para así derrotar al terrorismo y evitar crimenes tan graves como este", se indicó en el boletín.
La Misión de Apoyo de Naciones Unidas en Libia (Unsmil, por sus siglas en inglés) facilitó el 11 de febrero un nueva ronda de diálogo político en la localidad libia de Gadamés.
Unsmil informó que por primera vez, todos los participantes invitados asistieron a las conversaciones, en lo que describió como un ambiente constructivo y positivo, dijo el vocero de la ONU, Stephane Dujarric. "Los participantes pidieron a todas las partes trabajar en una reducción del componente militar para poder realizar el diálogo en un entorno positivo".
Las dos rondas anteriores de las conversaciones sobre Libia con mediación de la ONU fueron llevadas a cabo en la Oficina de Naciones Unidas en Ginebra.
El prolongado conflicto en Libia ha causado una crisis humanitaria en la que al menos 120.000 personas han tenido que huir de sus hogares, lo que ha resultado en la escasez de alimentos y suministros médicos con un creciente número de muertos.
Un reciente brote de violencia ha asolado aún más al país cansado de la guerra. Libia ha estado en conflicto desde el inicio de su guerra civil en 2011 que resultó en la destitución del fallecido líder Muammar Gaddafi.
En la ciudad oriental de Bengazi, el incremento de la violencia ha provocado 450 muertes desde octubre de 2014 mientras los residentes siguen enfrentando una falta de atención médica. Además, al menos 15.000 familias, cerca de 90.000 personas, han sido desplazadas.