ATENAS, 16 feb (Xinhua) -- Funcionarios griegos rechazaron hoy categóricamente la posibilidad de presentar una solicitud para la extensión del actual programa de rescate luego de que la más reciente reunión del Eurogrupo en Bruselas sobre la crisis de la deuda griega terminó en un estancamiento.
"Todos los griegos unidos dicen que no. No seremos chantajeados. Tenemos un mandato popular para llevar esto hasta el fin", dijo en Atenas Panos Kammenos, ministro de Defensa y líder de los Griegos Independientes de derecha, socio minoritario de la coalición gobernante de izquierda.
El gobierno encabezado por el partido radical de izquierda Syriza fue elegido el 25 de enero. El gobierno prometió poner fin a la austeridad y dar marcha atrás a las políticas de rescate implementadas desde 2010.
El nuevo gobierno propuso la semana pasada un acuerdo puente a los socios de la eurozona, quienes insisten en tener más garantías de que el programa de estabilidad y reforma emprendido hace cinco años no será desbaratado.
A pesar de las infructuosas conversaciones en la última reunión del Eurogrupo, el ministro de Finanzas de Grecia, Yanis Varoufakis, dijo hoy a los medios en Bruselas que Grecia está "dispuesta a alcanzar un acuerdo honorable".
El ministro resaltó que Grecia seguirá siendo miembro de la eurozona.
Varoufakis confirmó los comentarios de las fuentes del gobierno griego en Atenas en el sentido de que los socios europeos presentaron hoy a la parte griega una iniciativa "poco razonable e inaceptable" que estaba varios pasos atrás en relación con el acuerdo del jueves pasado entre el primer ministro, Alexis Tsipras, y el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, para la base de discusión de hoy.
El jefe del Eurogrupo dijo que todavía queda algo de tiempo esta semana para que Grecia acuerde una extensión de modo que otro Eurogrupo pueda cerrar un nuevo contrato el viernes.
Cualquier nuevo acuerdo tiene que ser aprobado por los gobiernos nacionales, de modo que el reloj avanza y sin un acuerdo y nueva ayuda financiera de los prestamistas internacionales, Grecia podría quedarse sin dinero y en riesgo de salir de la eurozona, advirtieron analistas.