NACIONES UNIDAS, 12 feb (Xinhua) -- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, advirtió hoy que "Yemen se está derrumbando antes nuestros ojos" y exhortó a la comunidad internacional a "hacer todo lo posible" por ayudar a este país que se encuentra al borde de la anarquía.
"Permítanme ser claro: Yemen se está derrumbando ante nuestros ojos. No podemos observar con indiferencia", dijo Ban en una reunión del Consejo de Seguridad y advirtió que Yemen enfrenta "múltiples desafíos" que amenazan la paz y la seguridad regionales e internacionales.
Las declaraciones de Ban se producen después de su visita a Arabia Saudí y Emiratos Arabes Unidos, en donde discutió con los líderes de estos países sobre todo la manera de evitar una guerra civil en Yemen.
Todos expresaron una gran preocupación por el hecho de que la situación "podría agravarse de manera significativa" a menos que se emprendan acciones más decididas y coordinadas.
La situación de seguridad en Yemen se ha deteriorado desde enero cuando el grupo chiita houthi tomó el palacio presidencial en Saná, la capital, después de letales enfrentamientos con guardias presidenciales.
El presidente Abd-Rabbu Mansour Hadi y el primer ministro Khaled Bahah presentaron su renuncia el 22 de enero.
El 6 de febrero, el grupo houthi anunció una acción unilateral para disolver el Parlamento y formar un consejo presidencial para tomar el poder, lo cual fue rechazado por los partidos políticos de Yemen y denunciado por los Estados árabes del golfo.
"Dadas estas preocupantes circunstancias", dijo Ban, "tenemos que hacer todo lo posible por ayudar a Yemen a alejarse del sitio en el que se encuentra y a volver a encauzar el proceso político".
Tras destacar la importancia de ayudar al pueblo yemení a restablecer una autoridad gubernamental legítima tan pronto como sea posible, Ban pidió a todas las partes abstenerse de cualquier nueva provocación e implementar el mapa de ruta acordado sobre la transición de Yemen "de manera plena y sin más demoras".
Ban también las exhortó a participar en las negociaciones apoyadas por la ONU y a cooperar de buena fe.
El grupo chiita houthi, también conocido con Ansarullah con sede en la provincia norteña de Saada, ha estado ampliando su influencia hacia el sur desde la firma de un acuerdo de paz y poder compartido, patrocinado por la ONU, el 21 de septiembre de 2014 luego de una semana de letales enfrentamientos.
El lunes, los partidos políticos de Yemen y el grupo houthi reanudaron conversaciones con la mediación del enviado de la ONU Jamal Benomar con el fin de encontrar una solución pacífica a la actual crisis.