MUNICH, 8 feb (Xinhua) -- La presente 51º Conferencia de Seguridad de Múnich ha sacado a la luz las diferencias existentes entre Estados Unidos y sus aliados europeos respecto a la posibilidad de enviar armas a Ucrania.
Al intervenir en el encuentro de funcionarios y expertos de seguridad de alto nivel, la canciller alemana, Angela Merkel, expresó el sábado que enviar armas a Ucrania no ayudaría a resolver la crisis de ese país.
Sus declaraciones fueron un claro mensaje de que en este particular Europa no piensa de la misma manera que EEUU, país que valora la posibilidad de proveer armas para la tropas gubernamentales ucranianas.
Aunque admitió no poder garantizar el éxito del plan de paz germano-francés presentado esta semana a Moscú y Kiev, Merkel sí mostró su convencimiento de que enviar armas a Ucrania no es una opción.
"Entiendo el debate, pero creo que más armas no facilitarán el progreso que necesita Ucrania. Realmente lo dudo mucho", afirmó la canciller alemana, quien recién regresó de una visita a Moscú junto al presidente francés, Francois Hollande, dirigida a intentar conseguir un alto el fuego en Ucrania.
Para ilustrar su posición, Merkel incluso se refirió a su experiencia durante la niñez cuando observó la construcción del Muro de Berlín, argumentando que entonces nadie pensó en el uso de la fuerza para detener el proyecto, ni la caída de dicho muro se logró a través de medios militares.
En la misma conferencia, el vicepresidente estadounidense, Joe Biden, aunque no especificó las posibles acciones de su país de proveer armas a Ucrania, declaró que el gobierno norteamericano estaba listo para brindar apoyo a Ucrania para que pudiese defenderse.
EEUU ya ha enviado a Ucrania equipamiento militar no letal, como chalecos y cascos blindados.
En un claro intento para reducir las desavenencias entre su país y sus aliados europeos, Biden resaltó que él y el presidente Barack Obama acordaron no escatimar esfuerzos para solucionar el conflicto de manera pacífica.
Merkel viajará a Washington para reunirse con Obama el domingo y se espera que la crisis de Ucrania sea una prioridad en su agenda.
En medio de un intenso debate en el foro sobre si vale la pena arriesgarse a proveer armas a Ucrania, el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, aprovechó la ocasión para pedir "armas defensivas" del extranjero.
En una discusión de panel, Poroshenko aseguró que su gobierno está dispuesto a implementar la "tregua integral e inmediata" que necesitada urgentemente Ucrania.
Destacando que Kiev tiene el derecho de defender a su pueblo, el mandatario solicitó apoyo político, económico y militar del extranjero, pero enfatizó que su gobierno solo quiere "armas defensivas".
"Durante todo el conflicto hemos demostrado ser responsables de que no usaremos el equipamiento defensivo para lanzar ataques", precisó.
Mientras tanto, altos funcionarios de Rusia, otra parte clave para resolver la crisis de Ucrania, manifestaron en el foro que la crisis no puede solucionarse a través de medios militares y que el diálogo continuará y "muy posiblemente logrará resultados".
Al exponer la posición rusa y explicar los elementos históricos y étnicos de la crisis, el canciller ruso, Sergey Lavrov, también criticó a Occidente por "culpar a Rusia de todo".
Estados Unidos y sus aliados son quienes han realizados acciones para intensificar el conflicto en Ucrania, sentenció Lavrov.