KABUL, 1 ene (Xinhua) -- Las Fuerzas de Seguridad Nacional de Afganistán (ANSF, siglas en inglés) asumieron este jueves todas las responsabilidades de seguridad del país de parte de las tropas lideradas por la OTAN, una vez que finalizó la transición en esta materia, anunció el presidente afgano, Mohammad Ashraf Ghani.
"Las fuerzas de seguridad nacional de Afganistán son las responsables de los servicios de seguridad de todo el país desde hoy en adelante. Es un día de bendiciones y felicitaciones. Felicito a los afganos por este día histórico", manifestó Ghani en una reunión convocada para destacar el evento.
La transición de las responsabilidades de seguridad de parte de las tropas de la OTAN a las ANSF comenzó en julio de 2011 y se prolongó hasta el final de 2014.
Este jueves, 1 de enero, también entraron en vigor dos acuerdos firmados el pasado mes de septiembre por Afganistán; un pacto de defensa y seguridad entre Estados Unidos y el país asiático, conocido como Acuerdo de Seguridad Bilateral (BSA, siglas en inglés), y un acuerdo entre la OTAN y el Gobierno afgano, denominado Estatus de las Fuerzas de la OTAN (SOFA, siglas en inglés).
El BSA y el SOFA permitirían a Estados Unidos y a la OTAN mantener alrededor de 13.000 soldados en suelo afgano.
En esta jornada, la Fuerza Internacional de Asistencia de Seguridad liderada por la OTAN (ISAF, siglas en inglés) también pasó de tener un rol de combate a uno de apoyo, bajo el nombre de misión de Apoyo Resuelto, que se centrará en el entrenamiento, la asesoría y la asistencia de las fuerzas afganas.
"Desde hoy en adelante las decisiones serán tomadas por los afganos y nuestros aliados internacionales nos ayudarán", apuntó Ghani.
"Quiero dar las gracias a nuestras fuerzas de seguridad y defensa. Ellos son los verdaderos hijos de Afganistán. Estamos orgullosos de ellos. Confiamos en ellos. Quiero que todos los afganos los apoyen", enfatizó el líder afgano, que agradeció a las ANSF sus sacrificios y su compromiso.
Durante su discurso de 45 minutos, el presidente advirtió que "los países de la región tienen que saber que ningún lugar en Asia es seguro a menos que Afganistán sea seguro y pacífico".
El grupo insurgente talibán ha intensificado las actividades subversivas con una cadena de atentados con bombas y ataques armados en los últimos dos meses, cuando la mayoría de las tropas extranjeras estaban marchándose del país.
Unos 5.000 soldados afganos fueron abatidos el pasado año, mientras que 10.000 civiles resultaron muertos y heridos en 2014.