Por Raúl Menchaca

LA HABANA, 18 jul (Xinhua) -- Cuba no se ilusiona con el restablecimiento de relaciones con Estados Unidos y la reapertura de las respectivas embajadas en Washington y La Habana, sostuvo hoy un académico cubano.

"Cuba no se hace ilusiones con respecto a las relaciones normales o lo que son relaciones normales con Estados Unidos", dijo a Xinhua el profesor Esteban Morales, director honorario del Centro de Estudios Hemisféricos y sobre Estados Unidos de la Universidad de La Habana.

Doctor en Ciencias Económicas y miembro titular de la Academia de Ciencias de Cuba, Morales explicó que la reapertura de embajadas representa un facilitamiento del contacto de una manera más formal y adecuada, después de más de medio siglo de ruptura.

Sin embargo, matizó que Estados Unidos tiene sus costumbres propias para la actividad diplomática en el mundo "y no pocas veces no respeta las reglas".

"La historia que nosotros tenemos en Cuba es el irrespeto a las reglas diplomáticas", subrayó el politólogo de 73 años.

En ese sentido, Morales desmenuzó el accionar de la Sección de Intereses de Washington en La Habana que, dijo, ha distribuido propaganda y dinero, además de reclutar personal para la actividad subversiva en la isla.

No obstante, se mostró esperanzado con que los nexos bilaterales transcurran ahora de acuerdo con las reglas de la Convención de Viena, un acuerdo internacional que norma la actuación del personal diplomático.

"Además deben decursar como relaciones entre vecinos que respetan su soberanía e independencia mutuas", señaló el profesor, quien fundó, y dirigió entre 1980 y 1999, el Centro de Estudios sobre Estados Unidos de la Universidad de La Habana.

Sobre una futura normalización de los lazos bilaterales, estimó que ese será un proceso muy complejo, que va a ser largo y tiene sus dificultades propias.

Recordó que para Cuba no es posible llegar a tener relaciones normales si existe el bloqueo impuesto a la isla por Washington, si permanece la Base Naval de Guantánamo, o se mantiene una política migratoria demasiado agresiva, cimentada en la ejecución de la Ley de Ajuste Cubano en 1966.

También señaló que Estados Unidos debe tomar las medidas necesarias para compensar a Cuba de los daños ocasionados por esa política agresiva, particularmente el bloqueo, que golpeó fuerte a la economía y a la sociedad cubana.

Además, agregó, Washington debe terminar con la agresividad radial y televisiva que desarrolla para fomentar la subversión en la isla.

"Es decir hay una serie de obstáculos y dificultades, pero espero que por razones de voluntad política y de intención que han mostrado las dos partes, esas relaciones puedan transcurrir debidamente", subrayó Morales.

De acuerdo con el investigador, Estados Unidos no está habituado a negociar con nadie sobre la base del respeto a la soberanía y en condiciones de igualdad, "pero hay razones por las cuales las deben aceptar".

Afirmó que Washington "tiene interés en arreglar las relaciones con Cuba porque tiene un hemisferio complicado que avanza en sus nuevas organizaciones, en sus nuevas políticas, donde Estados Unidos no está presente".

"Pienso que ellos van a tomar medidas en ese sentido y van a comportarse de una manera que no les genere más dificultades en un hemisferio que observa detenidamente cuál es el tratamiento que le van a dar a Cuba, que funciona como modelo para saber cómo pueden ser las relaciones con Estados Unidos", explicó Morales.

El académico se mostró optimista sobre lo que consideró como una oportunidad única para la isla de negociar sus vínculos con Washington.

Autor de una decena de libros sobre las relaciones entre Washington y La Habana, el más reciente texto de Morales, publicado en 2011 en coautoría con el investigador cubano Elier Ramírez, se titula "De la confrontación a los intentos de normalización. La política de los Estados Unidos hacia Cuba".