Por: Juan Limachi
LIMA, 18 abr (Xinhua) -- Perú puede tener problemas para ingresar a la Organización de Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), debido a los pobres estándares socioambientales por las actividades extractivas, dijo hoy el subdirector de la organización CooperAcción, José de Echave.
"Un país que está retrocediendo en temas ambientales, sin duda, va tener problemas y la OCDE cuenta con exigencias exactas en materia socioambiental que el país no podrá cumplir", expresó el ambientalista en entrevista con Xinhua.
Perú se encuentra en proceso de admisión a la OCDE, con sede en la ciudad de París, Francia, y que cuenta en su seno con 34 de los países más ricos que representan alrededor del 70 por ciento de la economía mundial.
La preocupación de De Echave, quien también ocupó el puesto de viceministro de Ambiente del presidente peruano Ollanta Huamala, se debe a los diversos conflictos sociales que registra este país andino como consecuencia de las quejas de las comunidades donde se desarrollan algunos proyectos mineros.
Cotó como ejemplo el proyecto minero Tía María, en la población de Islay, ubicada en la región surandina de Arequipa, 966 kilómetros al sureste de Lima, donde los pobladores se oponen a las actividades extractivas.
Los habitantes alegan peligro de degradación ambiental y la contaminación de sus ríos, lo cual pone en peligro sus actividades agrarias y ganaderas.
De Echave sostuvo que un reciente informe sobre el desempeño ambiental de los países en 2014, Perú mostró índices preocupantes de degradación ambiental, en desmedro de la salud de los habitantes.
"Perú figura en la posición 123 de 148 países evaluados a nivel internacional en materia de desempeño ambiental", subrayó.
Indicó que el citado informe, elaborado por la Universidad de Yale, ubica a Perú en la posición 123 en materia de Impacto en la salud, mientras que en calidad del aire se encuentra en el lugar 75 y en agua y saneamiento en el sitio 121.
El representante de CooperAcción señaló que el 85,3 por ciento del territorio de la provincia de Islay, departamento de Arequipa, está invadido por concesiones mineras, un nivel muy por encima de cualquier coherencia racional.
"Sin duda, con esta muestra, no podemos ser considerados un país en desarrollo. No podemos ser considerados un país del primer mundo, porque los países del primer mundo fortalecen sus instituciones", indicó.
Recordó que la Defensoría del Pueblo también informó sobre 55 conflictos sociales en los últimos 25 meses, 44 en los los últimos 27 meses y 10 en los primeros meses del año.
El más importante en lo que va de este año es el del proyecto Tía María, donde según una encuesta la mayoría de personas afectadas por los conflictos sociales en los centros mineros considera que no se protegen sus derechos.
"No estamos en los primeros lugares, estamos retrocediendo de manera dramática en estos estándares", señaló De Echave al mostrar su preocupación por el riesgo ambiental que corren los pobladores afectados por la falta de regulaciones que protejan a estas comunidades.
"Hay que pensar seriamente, si queremos ser considerados como un país del primer mundo, si queremos que la economía crezca", subrayó.
Aclaró que las organizaciones sociales y productivas, relacionadas al agro y la ganadería, no se oponen a la actividad extractiva, lo único que demandan es la existencia de regulaciones que garanticen la calidad de sus aguas y el aire que respiran, sin afectar sus existencias.
"Queremos inversiones, pero no cualquier tipo de inversiones. Queremos inversiones serias con empresas que estén acostumbradas a trabajar con estándares elevados", añadió.
El representante de CooperAcción señaló que continúa la degradación ambiental y en otros sectores productivos, como los servicios y la actividad turística.
"Perú tiene que apostar por la diversificación de la economía y no debe depender solamente de una actividad monoproductora, aunque sí creo que se debe mejorar la calidad de la producción minera", expresó.
De Echave recordó que si Perú quiere formar parte de la OCDE tiene que acatar los principios de esta organización, la cual promueve políticas para mejorar el bienestar socioeconómico de sus habitantes y se adhiere a los principios de una economía abierta y transparente.
"No podemos pensar que solamente vamos a seguir siendo productores de materias primas, como lo hemos sido durante los últimos 40 años, creo que significa tratar de seguir una senda que ya se agotó", destacó.
Perú tiene una economía basada en la actividad extractiva, una pesada herencia de la época colonial que en la actualidad representa alrededor del 60 por ciento del producto interno bruto (PIB), concluyó.