RIO DE JANEIRO, 6 abr (Xinhua) -- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, defendió hoy la necesidad de aplicar ajustes fiscales en la economía del país para intentar salir de la crisis que padece Brasil, pero prometió que los principales programas educativos no sufrirán cortes.
En la toma de posesión del nuevo ministro de Educación, Renato Janine Ribeiro, Rousseff dijo que su Gobierno intentará ampliar la oferta de enseño a tiempo integral, especialmente en las áreas con mayores índices de violencia.
"Prometo que la necesidad imperiosa de promover avances en la economía, con el corte de gastos, no afectará los programas esenciales y estructurales del Ministerio de Educación", dijo la mandataria.
Rousseff agregó que no habrá ningún reculo en la política de garantizar el enseño superior ni en la concesión de becas para que universitarios brasileños hagan intercambio en el exterior, y garantizó que el programa "Ciencia Sin Fronteras" continuará llevando los jóvenes del país "a estudiar en las mejores universidades del mundo".
En el mismo acto, la presidenta brasileña dijo que el Gobierno mantendrá la meta de universalizar el acceso de los menores de 4 y 5 años a la escuela hasta 2016, como se contempla en el Plano Nacional de Educación.
"Continuaremos ampliando la oferta de enseño en tiempo integral, sobre todo en áreas con mayor incidencia de violencia", dijo.