PARIS, 16 jul (Xinhua) -- El secretario de Estado encargado de Comercio Exterior, Promoción del Turismo y de Franceses en el Extranjero, Matthias Fekl, indicó que "China sigue siendo un país con muchas oportunidades para nuestras empresas por su dinamismo económico".

En una entrevista por escrito con Xinhua, Fekl señaló que el crecimiento cada vez mayor de Beijing ha creado una clase media más amplia cuya demanda de bienes sigue incrementándose y agregó que las compañías locales deben aprovechar esta tendencia.

"Cada año, millones de ciudadanos chinos se integran a la clase media y compran equipo para sus casas, adquieren un auto, utilizan nuevos servicios y viajan. Estas son oportunidades que nuestros empresarios pueden y deben aprovechar a través de las exportaciones de Francia o estableciéndose en el país", indicó el funcionario gubernamental.

De acuerdo con datos emitidos por el Instituto Nacional de Estadística de Francia, 11.552 compañías francesas exportaron a China en 2013, en su mayoría pequeñas y medianas empresas (pymes) y compañías de mediano nivel.

Además, 1.500 compañías francesas se establecieron en ese período en China, principalmente en Shanghai, Beijing y Guangzhou.

Para Fekl, "Francia es un importante socio comercial de China" porque es el segundo mayor exportador en Europa hacia ese país asiático, después de Alemania. El año pasado, las ventas de Francia a China ascendieron a 16.200 millones de euros (cerca de 17.700 millones de euros).

Sin embargo, "la relación comercial entre Francia y China sigue siendo desequilibrada porque nuestro déficit comercial ascendió a 26.000 millones de euros en 2014, el mayor déficit de Francia con otro país del mundo", reconoció el secretario.

Fekl reiteró la disposición de los líderes de ambos países a impulsar los vínculos comerciales a través de "estructurar la asociación".

En este contexto, la segunda mayor potencia de la eurozona quiere reforzar la cooperación en sectores prometedores como procesamiento de alimentos, servicios de salud, desarrollo urbano y nuevas tecnologías, en los que "las necesidades de China son importantes y las destrezas y conocimientos franceses son bien conocidos".

En 2014, las ventas de Francia a China subieron 9,7 por ciento; el sector aeronáutico tuvo el mejor desempeño con un crecimiento de 24,6 por ciento, seguido de las industrias automotriz y de las telecomunicaciones, cuyas ventas crecieron 19 y 14,3 por ciento respectivamente.

"Estas cifras reflejan las fortalezas de la oferta francesa y la estructura de las exportaciones francesas refleja el dinamismo de las nuevas necesidades de la clase media china en ascenso", indicó el secretario francés.

Francia es el quinto mayor exportador del mundo, principalmente en las industrias aeronáutica, farmacéutica, de cosméticos, bienes de lujo y procesamiento de alimentos.