Por Omar Mendoza

SANTIAGO, 31 dic (Xinhua) -- El desarrollo económico y social ha permitido que millones de personas dejen atrás la pobreza y disfruten de mejores condiciones de vida, tanto en China como en América Latina, afirmó hoy el diplomático chileno Fernando Reyes Matta.

En una entrevista con Xinhua, el ex embajador chileno en China expresó que Latinoamérica y la nación asiática llegan al 2015 con un resultado "muy positivo" en cuanto a reducción de la pobreza.

El actual director del Centro de Estudios Latinoamericanos sobre China afirmó que precisamente el próximo año se revisarán las llamadas Metas del Milenio de las Naciones Unidas (ONU).

Si se comparan las cifras de pobreza que tenían China y la región latinoamericana al comenzar el milenio con las actuales, se aprecia que en ambos casos "se ampliaron muchos sectores que han ascendido a las llamadas clases medias", subrayó.

Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la tasa de pobreza en la región cayó hasta el 27,9 por ciento de la población en 2013, en comparación con el 43,9 por ciento de 2002.

Reyes Matta recordó que en la última década se registraron progresos en la reducción de la pobreza, con 51 millones de personas que accedieron a la clase media.

Entre 2000 y 2010, una proporción importante de la población se integró a la clase media debido al desarrollo de políticas sociales y al crecimiento económico, acotó.

No obstante, indicó, unos 216 millones de latinoamericanos están en riesgo de volver a caer en situación de pobreza.

En cuanto a las relaciones entre América Latina y China, el ex embajador recordó que la primera actividad bilateral en 2015 será el primer encuentro ministerial del Foro China-CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños), que se celebrará los días 8 y 9 de enero en Beijing.

"En 2015 estamos en otra etapa, la que obliga a ambas partes a asumir una agenda marcada por una interacción creativa distinta a la que se ha producido en los últimos años, que es la relación Estado, mercado y sociedad", aseguró.

Respecto a los temas que considera se debatirán en el foro CELAC-China en Beijing, Reyes Matta se refirió primeramente a las transformaciones de las clases medias y los cambios de calidad de vida en las ciudades, y a la modificación de las sociedades que hace décadas eran rurales y ahora son urbanas.

Además mencionó las aspiraciones de la juventud que ha llegado a niveles de educación superior de forma masiva y espera aplicar sus conocimientos, así como la manera en que la CELAC y China vincularán la capacidad de innovación y creatividad con los nuevos procesos productivos.

"Lo que puede mostrar América Latina es que no siguió el 'Consenso de Washington' con sus políticas neoliberales y hemos aplicado políticas de desarrollo social, demostrando que el Estado es fuerte y no débil", opinó.

Tanto en China como en América Latina, añadió, "se aprendió a valorar el papel del mercado y su capacidad como factor dinamizador del desarrollo".

"La sociedad reclama más porque está viviendo mejor, en condiciones de participación ciudadana", continuó.

Asimismo recordó que en América Latina, con altas y bajas, "el Estado ha tenido y tiene un papel fundamental para abordar las crisis y crear condiciones macroeconómicas sólidas y generar espacios de desarrollo para el resto de la sociedad".

"Tanto China como América Latina están viviendo un proceso de transformación de sus procesos productivos, aplican nuevas tecnologías y conocimientos, y generan nuevos espacios", declaró.

En este sentido puso el ejemplo del vino chileno, que hace 15 o 20 años no contaba con la calidad ni la presencia internacional actuales.

"En 2015, el vino chileno comenzará a entrar a China con cero arancel, según lo establecido en el Tratado de Libre Comercio bilateral, y eso significa que el mercado chino está abierto para este producto que se ha ido ganando un espacio en esa nación", concluyó.