BEIJING, 15 abr (Xinhua) -- El gobierno chino publicó hoy miércoles un libro blanco sobre la región autónoma suroccidental china del Tíbet, en el que elogia su camino de desarrollo al tiempo que denuncia "el camino intermedio" defendido por el Dalai Lama.
El documento, titulado "Opción histórico del Tíbet por el camino de desarrollo", sostiene que el actual modelo de desarrollo del Tíbet es correcto.
El continuo progreso del Tíbet en su actual senda de desarrollo es requisito objetivo de la civilización moderna y concuerda con la tendencia progresista de la sociedad humana, las condiciones imperantes y la realidad actual de China, así como con los intereses fundamentales de todos los grupos étnicos del Tíbet, señala el documento, publicado por la Oficina de Información del Consejo de Estado, el gabinete chino.
Sin embargo, el libro blanco indica que existe un grupo que se congrega alrededor del XIV Dalai Lama, representantes de los remanentes de los propietarios de siervos feudales que viven desde hace tiempo en el exilio, movidos por la meta política de la "independencia tibetana" y un apego sentimental a la servidumbre feudal teocrática.
Habiendo fracasado en incitar a la violencia para apoyar su causa, han recurrido al "camino intermedio", que niega el camino de desarrollo correcto e intenta crear un "Estado dentro del Estado" en el territorio chino como un paso provisional hacia su meta última de conseguir la independencia total, afirma el libro blanco.
"La única alternativa sensata es que el Dalai Lama y sus seguidores acepten que el Tíbet ha sido parte de China desde la antigüedad, abandonen sus objetivos de separar China y de buscar la independencia del Tíbet y comiencen a actuar en favor del interés del Tíbet y del país en general", manifiesta el documento.
El gobierno central ha seguido una política consistente y clara hacia el XIV Dalai Lama, enfatiza el libro blanco.
"Sólo cuando haga una declaración pública reconociendo que el Tíbet ha sido una parte integrante de China desde la antigüedad y abandone postura sobre la independencia y sus intentos de dividir China, podrá mejorar su relación con el gobierno central en cualquier sentido real", asegura el documento.
El gobierno central chino espera que el Dalai Lama deje de lado sus ilusiones en los años que le quedan y se enfrente a la realidad, adecue su postura, elija el camino objetivo y racional y haga algo beneficioso para los compatriotas tibetanos en el exilio, agrega.