BEIJING, 12 mar (Xinhua) -- China ha plantado 500.000 mu (unidad de medida de superficie que equivale a unas 33.000 hectáreas) de bosque desde 2009 para proteger el agua a lo largo de la frontera entre la capital del país, Beijing, y la provincia vecina de Hebei, indicó la Administración Estatal de Silvicultura hoy jueves, fecha en la que se celebra el 37º Día Nacional de la Plantación de Árboles.
Los árboles se han plantado mayoritariamente alrededor de los embalses de Miyun y Guanting, dos de los cuatro principales que proporcionan agua dulce a la ciudad.
La medida ha reducido de forma efectiva los sedimentos arrastrados hasta los embalses, según la administración.
Con el proyecto de forestación, la tasa de cobertura forestal en las áreas aguas arriba de las dos reservas alcanzó el 33,4 por ciento en 2011, por encima de la media nacional, que es del 21,6 por ciento.
Beijing se enfrenta a una grave escasez de agua. La ciudad tiene una falta de 1.500 millones de metros cúbicos cada año, según indicó el teniente de alcalde, Li Shixiang, en las sesiones anuales del máximo órgano legislativo y del máximo cuerpo asesor político del país de 2015.
"Beijing no puede resolver el problema por sí misma y solo se puede encontrar una solución con un plan para la región más amplia alrededor de Beijing. El desarrollo coordinado de Beijing y de las vecinas municipalidad de Tianjin y provincia de Hebei es imperativo", manifestó Li.
Con una población de 21,52 millones de personas en 2014, la capital de China tiene como objetivo mantener la cifra de habitantes por debajo de los 23 millones para 2020, dado que se enfrenta a una escasez de agua y de otros recursos.
El proyecto del trasvase sur-norte forma también parte de los esfuerzos por llevar agua al norte de China, una zona con falta de la misma. Agua procedente de un afluente del río Yangtse ha fluido a lo largo de unos 1.200 kilómetros hasta Beijing desde el 27 de diciembre de 2014.