BEIJING, 30 ene (Xinhua) -- La capital de China, Beijing, ha aprobado una regulación relativa al cuidado domiciliario de las personas de la tercera edad que estipula que los hijos están obligados a prestar asistencia a sus progenitores.

La ley recibió el visto bueno durante una reunión del Comité Permanente de la Asamblea Popular Municipal de Beijing celebrada el jueves. Entrará en vigor el 1 de mayo y se trata de la primera normativa del país en esta materia.

Según la regulación, los hijos y otros cuidadores deberán ofrecer apoyo económico y práctico, así como "consuelo espiritual", a sus mayores.

Además, se estipula que el gobierno deberá ofrecer subsidios e instalaciones de servicios para la tercera edad a los ancianos con dificultades especiales, como aquellos con bajos ingresos, que sufren discapacidades o que han perdido a su hijo único.

La legislación define el rango de responsabilidades para la familia y la administración pública, e incluye provisiones relativas a terrenos como la construcción de instalaciones de servicios para la tercera edad en las comunidades o de servicios médicos y sanitarios.

Alrededor del 96 por ciento de los ancianos de Beijing dependen del cuidado en el hogar, y el resto viven en residencias de la tercera edad.

Liu Jigang, vicedirector del Comité Permanente de la Asamblea Popular Municipal de la capital china, dijo que el cuidado domiciliario de las personas mayores sufre en Beijing de varios problemas, tales como falta de instalaciones y personal formado y un suministro inadecuado de servicios de pensiones.

De acuerdo con Liu, Beijing se ha convertido en una sociedad cada vez más envejecida desde 1990. La población de personas de la tercera edad de la ciudad se está ampliando en un 6 por ciento anual. Su número sobrepasó los tres millones a finales de 2014, y se espera que supere los cuatro millones para 2020.

En China residen en la actualidad aproximadamente 200 millones de personas de 60 años o más, lo que supone en torno al 14 por ciento de la población total, y se estima que la cifra se elevará a 400 millones para 2050. Más del 90 por ciento de las personas de la tercera edad en todo el país eligen asistencia social domiciliaria.