Por Noemí Galbán
Personas visitan la muestra pictórica "Mi amiga Alicia", en el Gran Teatro de La Habana, Cuba, el 20 de octubre de 2018. Más de 40 obras componen la muestra pictórica "Mi amiga Alicia", una exposición del reconocido artista plástico Nelson Domínguez que rinde homenaje a la icónica bailarina cubana, Alicia Alonso, a punto de cumplir 98 años de edad. En uno de los majestuosos salones del Gran Teatro de La Habana "Alicia Alonso", 39 lienzos, cuatro instalaciones, una escultura en bronce y tres creaciones de técnica mixta sobre resina y tela, quedaron expuestas este sábado para deleite de los incontables admiradores de la emblemática protagonista. (Xinhua/Joaquín Hernández)
LA HABANA, 20 oct (Xinhua) -- Más de 40 obras componen la muestra pictórica "Mi amiga Alicia", una exposición del reconocido artista plástico Nelson Domínguez que rinde homenaje a la icónica bailarina cubana, Alicia Alonso, a punto de cumplir 98 años de edad.
En uno de los majestuosos salones del Gran Teatro de La Habana "Alicia Alonso", 39 lienzos, cuatro instalaciones, una escultura en bronce y tres creaciones de técnica mixta sobre resina y tela, quedaron expuestas este sábado para deleite de los incontables admiradores de la emblemática protagonista.
"Alicia Alonso significa la esencia mantenida del espíritu, del desarrollo de la danza y del arte en general. Del gran magisterio que ha ejercido durante toda su trayectoria, por lo que seguirá siendo toda la vida un hito como figura internacional del ballet", señaló a Xinhua Domínguez.
Para el multifacético pintor caribeño, la esbeltez y ductilidad de una de las más aclamadas exponentes de la danza latinoamericana de toda la historia, fueron motivos de inspiración para, por más de una década, intentar captar su naturaleza.
"Ella es como una cuerda que se puede enrollar, se puede estirar, se puede poner en espiral. Para mí es un ejemplo artístico de lo que reflejan todos los movimientos de la danza", destacó.
La exposición, abierta al público hasta el venidero diciembre, mes en el que Alicia Alonso cumplirá 98 años, se estructura en cuatro actos encargados de mostrar diferentes facetas de la vida de la prima ballerina assoluta cubana, como artista, maestra, mujer y representante de la cultura cubana.
Precisamente sobre este último aspecto, Domínguez recordó que este 20 de octubre se celebra el Día de la Cultura Nacional, una fecha de gran significación para los habitantes de esta isla.
"Dedicación, entrega, pasión, investigación, inconformidad, eso es Alicia para mí y creo que para todos los cubanos. Ella logró, en un país donde apenas la cultura se dibujaba, introducir el ballet que es una manifestación de las clases más altas. Cuba tiene ese placer, ese goce", opinó.
Similar apreciación compartió con Xinhua, Marta Martínez, una habanera de 69 años, quien agradece a la responsable de masificar en la isla un arte tan elitista, tener la dicha de ver a su nieta formarse gratuitamente para lograr su sueño de ser bailarina.
"La exposición me parece preciosa porque recoge la historia de Alicia y eso es muy importante para la nación cubana. Ella significa mucho para todos, especialmente para las nuevas generaciones de bailarines que se emocionan cada vez que la ven porque están conscientes de su grandeza", apuntó.
Muy cerca de ella se encontraba su nieta, Adriana Montero, una pequeña de 7 años quien desde hace tres cursos asiste con regularidad a los talleres vocacionales para niños de la Escuela Nacional de Ballet "Fernando Alonso" de La Habana.
Allí, junto a cientos de alumnos, aprende no sólo las posiciones y técnicas propias de la danza clásica, sino la importancia de defender su cultura y su país a través del arte.
Tal y como lo hizo desde 1948 Alicia Alonso cuando creó primero una compañía profesional con su nombre que devino posteriormente en el Ballet Nacional de Cuba.
Además de fundar la academia, donde se formarían las nuevas generaciones de artistas que por décadas han enaltecido la cultura de la isla caribeña con sus movimientos.
"Me gustaría cuando sea grande ser famosa como ella. Me emociona bailar y Alicia Alonso me inspira porque es muy habilidosa, muy elástica", señaló Adriana.
Ella sólo ha visto bailar a su ídolo mediante filmaciones, pero bastan para reconocer el talento que encumbró a la excepcional bailarina en la historia de la danza mundial.
"Esta exposición que antecede al Festival Internacional de Ballet, es un homenaje en vida a Alicia que sirve de ejemplo para todos, sobre todo para los bailarines de qué es lo que significa ser un artista", manifestó Nelson Domínguez.
La muestra, preámbulo de la 26 edición de la cita danzaria más importante de Cuba a celebrarse del 28 de octubre al 6 de noviembre en La Habana, es una constante provocación al espectador.
"Mi amiga Alicia" propone una mirada aguda, frontal y al mismo tiempo sensible hacia un símbolo de Cuba, una figura que se revela mediante las creaciones de Domínguez, misteriosa, espiritual, mítica, irreverente, pero sobre todo humana.
