WASHINGTON, 20 jun (Xinhua) -- Ante una enérgica reacción nacional e internacional, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó hoy una orden ejecutiva para poner fin a la controversial práctica de su administración de separar a los niños de sus familias luego de detenerlos al cruzar ilegalmente la frontera hacia Estados Unidos.
La medida se produce luego de que la práctica, resultado de la política de "cero tolerancia" de la administración Trump ante el ingreso ilegal al país, se topó con fuertes críticas tanto a nivel nacional como en el extranjero.
"Vamos a mantener juntas a las familias", dijo Trump en la Casa Blanca y añadió que "no nos gusta la imagen ni el sentimiento" de las familias divididas.
La orden de Trump, redactada por la secretaria de Seguridad Nacional Kirstjen Nielsen, ordena al departamento mantener juntas a las familias después de que son detenidas por cruzar la frontera de forma ilegal.
No obstante, el presidente dijo que la política de "cero tolerancia" continuará y que todos los adultos que sean sorprendidos cruzando la frontera de manera ilegal serán detenidos y procesados.
Imágenes y sonidos desgarradores de niños llorando condujeron a una enérgica oposición a las medidas tomadas por la administración Trump contra la inmigración indocumentada.
La presión también aumentó anoche luego de que, según informes, funcionarios de la administración Trump separaron por la fuerza a bebés y otros niños pequeños de sus padres en la frontera entre México y Estados Unidos y los enviaron a al menos tres albergues "de edad temprana" en el sur de Texas.
El presidente afirmó que la crisis de las separaciones familiares no puede resolverse con una orden ejecutiva e insistió en que las anteriores administraciones, los demócratas y el Congreso son los responsables de la situación
Los demócratas han afirmado que la crisis es culpa de Trump y lo han acusado de utilizar a los niños para obligarlos a negociar sobre temas migratorios y el muro fronterizo prometido durante mucho tiempo por el presidente.
De acuerdo con el Departamento de Seguridad Nacional, cerca de 2.000 niños fueron separados de sus familias después de atravesar de forma ilegal la frontera estadounidense en abril y mayo.
Trump anunció hoy con anterioridad su intención de firmar la orden en la Casa Blanca, pero reiteró que mantendrá su postura dura sobre migración y seguridad fronteriza.
"Mantendremos a las familias unidas, pero tenemos que mantener nuestras fronteras fuertes", dijo Trump. "De todos modos tenemos que mantener la dureza o de lo contrario nuestro país será invadido por gente, por el crimen y por todas las cosas que no nos representan y que no queremos".
El presidente también dijo que "haremos algo preventivo en cierta medida, pero al final será acompañado de legislación", mientras los legisladores batallan por encontrar puntos en común para soluciones legislativas a la separación de familias.
El presidente de la Cámara, Paul Ryan, dijo hoy que la cámara votará el jueves sobre una ley de inmigración que pondrá fin a la separación de las familias.
