GUANGZHOU, 24 mar (Xinhua) -- Chen Yongqiang es el dueño de una empresa que tiene su sede en un pequeño poblado y cuenta con apenas 20 empleados, pero su tarjeta de negocios tiene uno de sus lados impreso en inglés.
Hace dos años, Chen fundó Leayol, una compañía que produce bombillas y otros productos de iluminación situada en el poblado de Guzhen, bajo la jurisdicción de la ciudad de Zhongshan, en la provincia meridional china de Guangdong.
Al final del año pasado, la firma tenía un valor de producción de más de 5 millones de yuanes (791.000 dólares).
"Aunque mi empresa es pequeña, planeamos continuar explorando los mercados a lo largo de la Franja y la Ruta", dice Chen.
Leayol es una de las 25.000 compañías de productos de iluminación que hay en Guzhen, cuya superficie es inferior a los 48 kilómetros cuadrados y tiene 150.000 habitantes. Cada año, el poblado acoge a un millón de empresarios procedentes de todo el mundo.
Guzhen se ha beneficiado del comercio exterior como resultado del impulso dado por China a la Iniciativa de la Franja y la Ruta, que tiene como objetivo construir redes de comercio e infraestructura que conecten a Asia con Europa y África a lo largo de la antigua Ruta de la Seda para buscar el desarrollo y la prosperidad comunes.
"La iniciativa trae nuevas oportunidades para los manufactureros pequeños y micro", sostiene Ou Decheng, vicepresidente de la Asociación de Iluminación y Aparatos Electrónicos de Zhongshan.
Alrededor del 30 por ciento de los productos de iluminación fabricados en Zhongshan son exportados, y la proporción ha venido creciendo en los últimos años, apunta Ou.
Conocida popularmente como la "Capital de la luz" de China, Guzhen rivaliza con reconocidos centros internacionales de fabricación de productos de su tipo, como Milán, Frankfurt y Dallas.
Sus productos se venden a más de 130 países y regiones, y su industria de la iluminación ha superado los 100.000 millones de yuanes, cifra que representa más del 70 por ciento del total nacional.
Zhu Yongqing trabajó en el sector durante nueve años antes de establecer una empresa de comercio exterior en 2014 para ayudar a los negocios locales pequeños y micro.
El servicio primario de su compañía es organizar exposiciones en los países y regiones a lo largo de la Franja y la Ruta.
"Quiero proporcionar una plataforma para ayudar a más empresas a transformarse del modo actual de 'basar las ventas en la producción' al de 'basar la producción en las ventas'", lo que será de beneficio mutuo tanto para vendedores como para compradores, explica Zhu.
Con cada vez más empresas activas en la arena internacional, "la Franja y la Ruta" se ha convertido en una frase común en las negociaciones con los clientes extranjeros, asegura Zhang Diansheng, un asesor mercantil.
En 2017, el volumen del comercio exterior de China aumentó un 14,2 por ciento hasta llegar a 27,79 billones de yuanes, poniendo fin a dos años de caídas, según la Administración General de Aduanas.
Datos del Buró Nacional de Estadísticas muestran que el año pasado el comercio de China con los países a lo largo de la Franja y la Ruta se acercó a los 7,4 billones de yuanes.
Ya que la mayoría de las empresas de Guzhen son de tamaño pequeño y micro, están probando una estrategia de incorporse como un grupo para salir a los mercados extranjeros.
"Solíamos unirnos en grupos de dos o tres para participar en las exhibiciones en el extranjero, pero eso consumía mucho tiempo y era ineficiente", recuerda Chen.
Actualmente, las compañías actúan juntas como una alianza, alquilando escenarios para exhibiciones, invitando clientes específicos y realizando exposiciones en otros países, agrega el empresario.
China cuenta con la mayor industria de iluminación y la cadena industrial más completa, dice Wang Yongfu, director ejecutivo de una alianza de 11 empresas.
"Formamos esta alianza para vender nuestros diseños a nivel global en lugar de solo nuestros propios productos. De esa forma hemos cambiado nuestro rol tradicional como simples fabricantes de equipos", resalta Wang.