Por Juan Limachi
LIMA, 15 ago (Xinhua) -- El narcotráfico que se desplaza desde Perú y Colombia es una de las causas de la extrema violencia social que estremece a México, aseguró hoy el sociólogo y catedrático peruano, Eduardo José Arroyo.
Según el investigador social, el traslado de la cocaína que realizan los cárteles del narcotráfico parte de Perú, y tienen como punto de tránsito el territorio mexicano antes de llegar a su destino final en Estados Unidos, pero en su recorrido dejan una estela de violencia y muerte.
"En el caso concreto de México, la violencia que hay es porque ha enraizado a México como un punto de encuentro y salida del narcotráfico que sale de Perú y Colombia", dijo a Xinhua.
Arroyo indicó que el trasiego de estas sustancias ilícitas por el territorio mexicano ha provocado violencia criminal, social y su consiguiente respuesta del Estado para tratar de controlar esta situación.
Recordó que entre las zonas más afectadas por la ruta del narcotráfico, que inicia en Suramérica, se ubican espacios como "Guerrero, Chiapas y los estados del sur (de México), terrenos sumamente peligrosos".
El académico alertó que el narcotráfico y las diferencias que suscita la administración estadounidense del presidente Donald Trump, pueden amenazar la estabilidad económica, no sólo de México, sino también de la Alianza del Pacífico (AP).
"Yo no le auguro un buen futuro a la Alianza del Pacífico, precisamente por esta situación", aseguró Arroyo al hablar sobre este bloque comercial integrado por Colombia, Chile, México y Perú.
Para el investigador y ex presidente del Colegio de Sociólogos de Lima, quien ha profundizado sobre la realidad social en América Latina, la violencia producto del crimen y el neoliberalismo abierto puede tener efectos negativos en México y el resto de países latinoamericanos.
"La violencia que hay en México es producto de la ley de la ganancia que exporta esta valorización neoliberal, que se ha entronizado en los espíritus del ser humano", puntualizó.
Arroyo coincidió con los informes estadísticos de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida) de Perú, que da cuenta sobre la existencia de una superficie cercana a las 55.000 hectáreas ilícitas de cultivos de coca, insumo para elaborar cocaína.
"Perú ha superado a Colombia en las exportaciones de Pasta Básica de Cocaína, México es un puerto seguro rumbo a los países del norte, Estados Unidos y Europa", anotó.
CARTELES EN PERU
De acuerdo con las estimaciones de la Devida, los cárteles de las drogas en Perú producen unas 400 toneladas de cocaína al año.
Por su parte, la Fiscalía Especializada en Delitos de Tráfico Ilícito de Drogas reportó que de enero a noviembre de 2016 las autoridades peruanas decomisaron 44 toneladas de drogas, de las cuales 8.759 correspondieron a cocaína, 3.938 pasta básica de cocaína, el resto fue heroína y marihuana.
Según cifras del gobierno peruano, el narcotráfico en este país andino realiza un movimiento económico que genera unos 2.000 millones de dólares anuales.
El mayor espacio de producción de cocaína en Perú se encuentra en la zona amazónica del Valle de los Ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM), donde la Devida realiza labores de erradicación del cultivo de hojas de coca.
Durante los últimos años, los gobiernos peruanos han invertido unos 2.500 millones de dólares con la finalidad de introducir productos alternativos y la erradicación de los cultivos ilícitos.
La presidenta de la Devida, Carmen Masías, señaló que en lo que va del año el programa de erradicación de cultivos de hoja de coca ha erradicado 11.000 hectáreas en el VRAEM y en otras zonas amazónicas adyacentes.
El gobierno peruano tiene como meta lograr la erradicación de unas 25.000 hectáreas de cultivos ilegales de estas plantaciones al finalizar el 2017, mediante la introducción de productos alternativos como el café y el cacao. Fin