Por Yu Fei
BEIJING, 21 abr (Xinhua) -- Científicos probarán un medicamento para tratar la pérdida ósea durante el primer vuelo que está realizando la primera nave espacial de carga China, la Tianzhou-1. El fármaco se ha desarrollado especialmente para los astronautas, pero los expertos confían en que pueda ayudar a la población en general también.
La principal misión de la Tianzhou-1, lanzada el jueves, es probar la tecnología de reabastecimiento de propelente, que es fundamental para la construcción y funcionamiento de la estación espacial que China tiene proyectada. No obstante, cada viaje es una valiosa oportunidad para realizar experimentos en el espacio.
Científicos chinos aprovecharán el entorno de microgravedad para probar el efecto del ácido 3-hidroxibutírico (3HB) en la prevención de la osteoporosis, explicó el líder de la investigación, Chen Guoqiang, que es también el director del Centro de Biología Sintética y de Sistemas de la Universidad de Tsinghua.
Normalmente, la estructura sólida del tejido óseo se estimula y mantiene por la gravedad y el ejercicio físico, pero el entorno de microgravedad del espacio reduce la carga sobre los huesos, lo que causa una pérdida ósea rápida y osteoporosis, explicó Chen.
Un día de pérdida ósea en el espacio equivale a un año en la Tierra, ilustró.
La investigación muestra que los astronautas sufren una pérdida ósea mensual media de entre el 0,5 y el dos por ciento en el espacio, en especial en los huesos que soportan mucho peso, como la tibia, el fémur y las vértebras.
Cuando regresan a la Tierra pueden necesitar el doble o el triple de tiempo que permanecieron en el espacio para recuperarse y, en algunos casos, la pérdida ósea es permanente.
La microgravedad inhibe principalmente la diferenciación de los osteoblastos (células que forman los huesos), lo que, acompañado del crecimiento de la masa de los osteoclastos (células de reabsorción de los huesos), causa cambios en la estructura ósea, concretó Chen.
Los tratamientos farmacológicos habituales para la osteoporosis tienen varios efectos secundarios, entre los que se encuentran tumores y enfermedades cardiovasculares. Los medicamentos también son relativamente ineficaces para tratar la osteoporosis causada por la microgravedad.
Chen indicó que el 3HB es uno de los principales componentes de los cuerpos cetónicos, que se producen de forma natural en los mamíferos. Se ha utilizado para el tratamiento de la epilepsia desde hace muchos años.
"Hemos descubierto que el 3HB puede promover la formación de huesos", agregó Chen.
En un experimento en el que se simuló la microgravedad el efecto fue obvio.
A diferencia del 3HB sintético que se utiliza en los casos de epilepsia, el equipo de Chen utiliza la fermentación microbiana para producir este ácido, que tiene exactamente la misma estructura que el que se encuentra de forma natural en el cuerpo humano, de modo que es más seguro que los fármacos sintéticos, resaltó el experto.
Los experimentos que simulan el entorno de microgravedad se han realizado en la Tierra. Los científicos colgaron ratones de sus patas traseras y descubrieron que a los que se les había suministrado 3HB tenían unos huesos normales, pero a los que no se les había dado presentaban una grave pérdida ósea.
"Esperamos probar el efecto de la medicina en un entorno de microgravedad espacial real", expuso Chen.
Dado que la Tianzhou-1 no puede transportar animales, los científicos compararán muestras de osteoblastos tratadas con el 3HB con otras no tratadas. Se transmitirán a la Tierra imágenes microscópicas de las mismas.
A pesar de que China ha realizado muchos experimentos con la serie de naves espaciales Shenzhou y con los laboratorios Tiangong-1 y Tiangong-2, las oportunidades para hacer experimentos en estas condiciones siguen siendo escasas.
"Después de más de una década de investigación tenemos una oportunidad de realizar un experimento en el espacio. Valoramos mucho la ocasión. Esperamos que los científicos chinos tengan más oportunidades de desarrollar experimentos en la estación espacial de China en el futuro", añadió.
Los científicos creen que las tecnologías y la ciencia desarrolladas en la exploración del espacio pueden beneficiar a la gente en general. Por ejemplo, los pañales modernos para bebés se desarrollaron originalmente para que los usasen los astronautas en paseos espaciales extendidos y el sistema de unidad de cuidados intensivos se puso en marcha para hacer un seguimiento de los astronautas que se estaban preparando para ir a la Luna en los años 70.
La medicina para el tratamiento de la pérdida ósea también se podría utilizar para la población en general.
La osteoporosis es la séptima enfermedad más común en el mundo. Cada año causa 8,9 millones de fracturas en todo el planeta.
En China la padecen 90 millones de personas. La morbilidad de la osteoporosis entre los chinos con más de 60 años es del 56 por ciento, mientras que la tasa entre las mujeres postmenopáusicas se eleva a entre el 60 y el 70 por ciento.
Con el envejecimiento de la población de China, los casos de osteoporosis continuarán en aumento. Los expertos estiman que el número de pacientes alcanzará los 200 millones de personas en 2050 en el país, una cifra que representará el 13,2 por ciento de la población total.
"Esperamos resolver este problema global", manifestó Chen.
