MADRID, 21 feb (Xinhua) -- El presidente de Francia, Francois Hollande, y el jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, respaldaron con firmeza el proyecto de integración europea durante la XXV Cumbre Hispano-Francesa, que se celebró el lunes en la ciudad española de Málaga (sur).
Frente a peligros como el populismo o la ola antieuropeísta, ambas naciones "se conjuraron para tomar las medidas necesarias que permitan avanzar con rapidez en el proyecto de integración europea", explicó el presidente galo, según recoge hoy, martes, la prensa española.
En este sentido, respaldó que pueda haber una Europa de varias velocidades con España, Francia, Alemania e Italia al frente.
Rajoy insistió en que es importante valorar lo que significa Europa, como primera potencia mundial en el ámbito económico, mientras el jefe del Estado francés puntualizó: "Europa es útil, y así deben percibirlo los ciudadanos pese a oír voces críticas".
Hollande señaló también que "seguimos en el grupo de los Veintisiete, pero queremos avanzar con nuestro ritmo y con la voluntad de dar a los ciudadanos más progreso y bienestar".
En esa dirección situó la reunión que se celebrará el próximo 6 de marzo en Versalles (Francia), a la que invitó a Rajoy y que contará con la asistencia de la canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro italiano, Paolo Gentiloni.
Rajoy, por su parte, señaló: "Estamos más unidos que nunca, queremos más integración que nunca y vivimos en la región del mundo con mayor nivel de vida", al tiempo que defendió "seguir apostando con claridad por el mercado único y por la unión económica, monetaria y fiscal".
Ambos dirigentes defendieron también la política migratoria europea frente a los "muros", en alusión al presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
"¿Qué seríamos si Europa estuviera construyendo muros y pidiéndolos a los países africanos que los pagaran? Ese no es el modelo que deseamos porque no es un buen modelo ni desde el punto de vista ético ni político", enfatizó Hollande.
Sobre la amenaza terrorista para el continente, Hollande y Rajoy subrayaron la importancia de garantizar la gestión y el control eficaz de las fronteras exteriores de Europa y, al mismo tiempo, intensificar la cooperación en justicia, policía e información.
En cuanto al ámbito de la educación, en la cumbre se acordó que ambos gobiernos trabajarán para desarrollar proyectos comunes, sobre todo, en el campo de la formación profesional, una parte del sistema educativo que coincidieron en que hay que potenciar vistos sus buenos resultados para el empleo.
Por último, ambos países firmaron también convenios en materia deportiva, lucha contra el narcotráfico, emergencias en zonas fronterizas, incendios forestales y propiedad intelectual.
