MOSCU, 17 oct (Xinhua) -- El exitoso lanzamiento el lunes de la nave espacial Shenzhou-11 es otro paso adelante para que China se sitúe entre los líderes de la tecnología espacial, dijo Alexander Zheleznyakov, un experto ruso en la historia de los vuelos espaciales.
Está previsto que la nave, con dos astronautas a bordo, se acople al segundo laboratorio experimental espacial de China, Tiangong-2, lanzado a mediados de septiembre.
El lanzamiento representa el último esfuerzo de China en sólo unos meses para ser una potencia espacial, después del primer vuelo de su cohete portador de nueva generación Gran Marcha-7 en junio y el lanzamiento, en agosto, del primer satélite cuántico del mundo, llamado "Micius" en honor a un antiguo científico chino, entre otros avances.
Zheleznyakov, que es también miembro de la Academia Rusa de Cosmonáutica Tsiolkovsky, destacó que los logros y programas espaciales de China, especialmente el de exploración lunar, bien planificado y con avances constantes, son impresionantes y admirables.
Comentó que los atributos del laboratorio orbital Tiangong-2 indican cómo será la estación espacial que China quiere construir, parecida a la Estación Espacial Internacional y acoplando progresivamente otros módulos espaciales a la cabina básica.
A su juicio, el laboratorio experimental espacial de China ayudará a proporcionar soluciones para el acercamiento y el acoplamiento de naves espaciales y para desarrollar una operación a largo plazo del sistema de soporte de vida, con el fin de aumentar la seguridad de los astronautas y la duración del servicio de la estación espacial.
Aseguró que espera ver, en el futuro, un módulo nodal en la estación espacial china con múltiples puertos de acoplamiento, frente al único que tiene hoy el laboratorio Tiangong-2.
El experto ruso agregó que las misiones espaciales tripuladas pueden promover el desarrollo de distintas industrias, especialmente las de alta tecnología, porque los proyectos espaciales abarcan materiales nuevos, programas de aplicación avanzados y soluciones técnicas innovadoras, con resultados de vanguardia en muchas áreas.
Igor Lisov, un prominente experto espacial ruso y editor de la revista industrial Cosmonautics News, también encomió el desarrollo estable de los proyectos espaciales tripulados de China.
Con los logros obtenidos, precisó, China ya es capaz de probar nuevas tecnologías para el atraque de aeronaves de carga, operaciones relacionadas con el sistema de soporte de vida y el reciclaje del agua, entre otros, asegurando así la operación a largo plazo de su estación espacial en el futuro, con una menor dependencia de los suministros de la Tierra.
El presidente del Club Espacial de Moscú, Sergey Zhukov, quien es también un cosmonauta de prueba, afirmó que para China será una elección correcta construir una estación espacial basada en la estructura cilíndrica del laboratorio orbital Tiangong-2.
En cuanto a las perspectivas de la estación espacial china, Zhukov manifestó su convicción de que los avances tecnológicos pueden convertir la futura estación espacial en una terminal que permita misiones espaciales tripuladas que vayan más allá, así como paradas para labores de mantenimiento y carga de aeronaves como las lunares.
Una mayor colaboración entre Rusia y China beneficiará a ambas, sentenció.