QINGHAI, junio 30, 2016 (Xinhua) -- Imagen de archivo del 28 de septiembre de 2014 de un tren corriendo sobre la sección de Nagqu de la línea ferroviaria Qinghai-Tíbet, en la región autónoma del Tíbet, en el suroeste de China. El Ferrocarril Qinghai-Tibet cumple 10 años el 1 de julio de 2016. El ferrocarril de 1,956 kilómetros de longitud, que entró en servicio en julio de 2006, es el ferrocarril de meseta más alto y más largo del mundo y también el primer ferrocarril que conecta la región autónoma del Tíbet con otras partes de China. Las medidas de protección ecológicas tomadas durante y después de la construcción del ferrocarril se han asegurado de que fue construido como un "ferrocarril verde". Tomando nota de que la contaminación ambiental ha sido llevada bajo un control efectivo, se dice que el ecosistema de vegetación alpina ha sido efectivamente protegido, el medio ambiente del permafrost (parte profunda del suelo de las regiones frías permanentemente helada) se ha mantenido estable por años, las regiones con función ecológica han estado funcionando bien y el paisaje de meseta permanece intacto. (Xinhua/Wang Song)
LHASA/XINING, China, 1 jul (Xinhua) -- El tren Qinghai-Tíbet de China, el sistema ferroviario más elevado del mundo, conmemora hoy su décimo aniversario.
La línea ferroviaria de 1.956 kilómetros une al Tíbet con la vecina provincia de Qinghai. El sistema puso fin a la inaccesibilidad del Tíbet cuando se inauguró el 1 de julio de 2006.
A las 10:00 hora local, un tren Z323 lleno de gente proveniente de la ciudad sudoccidental de Chongqing llegó a la estación de trenes de Lhasa, la capital de la región, donde ya inició la temporada alta de turismo.
"Esta es la primera vez que estoy en el Tíbet. Vi rebaños de ovejas y ganado, así como montañas magníficas cubiertas de nieve desde las ventanas del tren", dijo Liao Xueyin, un turista de la provincia de Sichuan, en el suroeste de China.
Zhu Binyu, maquinista de un tren Z917 que partió hoy de la ciudad nororiental de Lanzhou hacia Lhasa, dijo sentirse honrada de trabajar durante el décimo aniversario.
Zhu, de 26 años de edad, dijo que el personal del tren compartirá un gran pastel con los pasajeros para celebrar.
No hubo celebraciones oficiales de alto perfil programadas para hoy. La oficina de correos de Qinghai realizó una pequeña ceremonia esta mañana en la estación de trenes de Xining para la emisión de una estampilla conmemorativa.
"Para nosotros los trabajadores ferrocarrileros, el décimo aniversario es un momento glorioso", dijo Lei Zengxiang, un trabajador de ferrocarriles que compró una serie de estampillas.
El tren Qinghai-Tíbet, cuya construcción inició en 2001, es el tren más largo del mundo construido sobre una meseta y su punto más elevado se ubica a 5.072 metros sobre el nivel del mar.
Losang Jamcan, presidente del gobierno regional, dijo hoy en una entrevista con Xinhua que el Tíbet continuará ampliando su red ferroviaria hasta el año 2030. "Para entonces, el Tíbet estará mejor conectado con las áreas circunvecinas y el sur de Asia", indicó.
"El Tíbet es un área abierta importante a lo largo de la frontera. Es una puerta clave a lo largo de los corredores económicos de China, Bangladesh, la India y Myanmar".
Jamcan dijo que el Tíbet construirá más líneas de transporte que unan al sur de Asia. La red ferroviaria se extenderá hacia los puertos de Jilung, Yadong y Burang a lo largo de las fronteras chinas con la India y Nepal, añadió.
CAMINO A LA PROSPERIDAD
Wang Fuhai, un chofer de camión, todavía recuerda las dificultades para conducir desde Xining, capital de Qinghai, hasta Lhasa antes de que se inaugurara el ferrocarril.
"El Tíbet era entonces un paraíso remoto. Podía tomar medio mes conducir hasta allá si había mucha nieve", dijo el chofer de 52 años de edad, quien añadió que cada viaje era una arriesgada aventura.
Ahora sólo se requieren 22 horas llegar a Lhasa desde Xining en tren, lo que disminuye enormemente los costos de transporte. El ferrocarril transporta actualmente el 75 por ciento de la carga hacia el Tíbet.
Antes de que se abriera la línea ferroviaria, un pollo podía costar alrededor de 110 yuanes (16,5 dólares) y el poder de compra de 100 yuanes en el Tíbet era equivalente a sólo 54 yuanes de las áreas costeras, declaró un investigador la Academia de Ciencias Sociales Regional del Tíbet, He Gang.
"El precio del jabón se ha reducido ahora a la mitad a seis yuanes, casi lo mismo que en las regiones internas", dijo Nyima Ngoezhub, quien viajó en tren en 2006 a la Universidad Sudoccidental de las Nacionalidades de Chengdu para estudiar.
Las compras en línea también se han vuelto más fáciles ahora que se pueden enviar paquetes por tren, dijo Ngoezhub quien actualmente trabaja en Xigaze, la segunda mayor ciudad en el Tíbet.
El Tíbet, con una población de alrededor de 3 millones de habitantes, encabezó al país en pagos móviles en 2015. El 83 por ciento de las compras en línea en la región se realizaron mediante teléfonos móviles. Los pagos en línea per cápita de los tibetanos promedió 32.000 yuanes en 2015, de acuerdo con Alipay, el sector de pagos del gigante de comercio electrónico chino Alibaba Group.
"El tren Qinghai-Tíbet rompió con el cuello de botella del transporte en el desarrollo social y económico del Tíbet", indicó He.
Hasta fines de mayo, 115 millones de pasajeros y 448 millones de toneladas de carga habían sido transportados por tren, lo que condujo el auge económico de la región en la última década.
De acuerdo con las estadísticas del gobierno tibetano, el producto interno bruto (PIB) aumentó de 25.000 millones de yuanes en 2005 a 102.600 millones de yuanes en 2015, con una tasa de crecimiento anual de más de 10 por ciento que encabezó al país durante años. Las cifras en Qinghai también aumentaron, de 64.000 millones de yuanes en 2005 a 241.700 millones de yuanes en 2015.
Gracias al tren, muchas maravillas naturales difíciles de alcanzar como el Gran Cañón del río Yarlung Zangbo y el monte Qomolangma (Everest) son accesibles ahora a los visitantes.
En 2015, 20,2 millones de turistas visitaron el Tíbet, 11 veces más que antes de que se inaugurara el tren. Los ingresos por turismo superaron el año pasado los 28.000 millones de yuanes, 15 veces más que hace una década.
Xi Yuxiu, quien abrió un restaurante pequeño a lo largo de la ruta del tren, está feliz de que se acerque la temporada alta de turismo.
"No será un problema ganar 80.000 yuanes en verano", declaró Xi de la aldea Xiaozhuang en el distrito autónomo de la etnia tu de Huzhu, en la provincia de Qinghai.
Además de promover el crecimiento en la región de la meseta, el tren Qinghai-Tíbet ha jugado un papel central para impulsar el comercio con el sur de Asia.
Una ruta de carga internacional Lanzhou-Xigaze-Katmandú, que combina transporte ferroviario y carretero, se inauguró en mayo.
"El tren Qinghai-Tíbet no sólo promueve la integración de la economía tibetana con todo el país, sino que se está convirtiendo en un punto básico en los lazos económicos de China con la India y Nepal", dijo Sun Yongfu, un académico de la Academia de Ingeniería de China.
El Tíbet añadirá otros 2,000 kilómetros de vías con una inversión total de 160.000 millones de yuanes en los próximos cinco años, de acuerdo con el gobierno regional.