SINGAPUR, 6 jun (Xinhua) -- Las operaciones que EEUU está realizando en aras de la llamada "libertad de navegación" en el Mar Meridional de China son fuertemente criticadas en una carta enviada al comandante del Comando del Pacífico de EEUU, Harry B. Harris, y reproducida en un artículo del diario singapurés "The Strait Times".
La misiva, escrita por Oh Beigong, hija de un pescador de la región china de Taiwán, es reproducida en un artículo firmado por Leslie Fong, vicepresidente ejecutivo de Singapore Press Holdings y exeditor del periódico, a quien también le fue remitida.
"Por lo poco que sé, lo que ella ha escrito es acertado, pero para que los lectores juzquen por sí mismos, la reproduciré en su totalidad", escribió Fong sobre la carta, que Oh adjuntó además al secretario de la Armada de EEUU, Ray Mabus, al secretario de Defensa de ese país, Ashton Carter, y al premier japonés, Shinzo Abe.
Oh comienza "felicitando" a Harris por las recientes operaciones basadas en la "libertad de navegación" del destructor con misiles guiados USS William P. Lawrence.
Recuerda que el 10 de mayo, sin permiso de Beijing y en una clara violación de la soberanía china, el buque penetró unas 12 millas náuticas del arrecife chino de Yongshu Jiao, en las islas Nansha, para imponer lo que la única superpotencia mundial proclama como su "derecho a la libertad de navegación".
Según Oh, algunos de sus amigos son de la opinión de que el destructor hizo una sola pasada, lo que calificaría su travesía como un paso inocente en conformidad con el artículo 18 de la Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (Convemar).
Sin embargo, este trayecto "inocente" de EEUU, argumenta Oh, al igual que otros similares realizados el año pasado o a principios de éste, conlleva el riesgo de provocar una enfrentamiento, igual que la colisión aérea ocurrida en 2001 y en la que un piloto chino murió.
"Seamos serios. EEUU está jugando con fuego al meterle a China el dedo en el ojo una y otra vez. En esta región, vamos a sufrir el daño colateral de estos giros sin control. ¿Por qué deberíamos pagar el precio cuando EEUU no tiene la razón?", se plantea.
Y continúa: "Como hombre que piensa, ¿no se siente por dentro en desacuerdo cuando EEUU continúa acusando a los chinos de ser los malos de la película en las disputas marítimas?".
Destaca también que Harris "debería saber mejor que la mayoría de la gente en este planeta que EEUU no ha sido capaz de citar una sola vez en la que China haya negado a nadie la libertad de navegación ni de señalar ninguna declaración de Beijing amenazando ese derecho".
"Por supuesto, Washington esgrime -por qué dejar que los hechos arruinen una buena excusa- que no puede permitir que quede incontestado el derecho a las aguas de China vinculado a la famosa línea de los nueve puntos en el Mar Meridional de China", precisa.
Recuerda la remitente que, en 1948, el Gobierno de China presentó una petición a las Naciones Unidas utilizando el mapa del Mar Meridional de China con la línea en cuestión dibujada y que nadie lo ha discutido hasta hace poco.
También recoge la acusación de Estados Unidos de que China va a militarizar las pistas de aterrizaje y otras instalaciones para desplegar su fuerza y, de esta manera, amenazar a la región.
"Viniendo de un país que opera 800 bases e instalaciones militares en más de 60 países del mundo, varias de ellas en el umbral de China, (esta acusación) es un poco absurda", indica la carta.
Señala que EEUU tiene 11 grupos de ataque de portaaviones recorriendo el planeta, "cada uno con suficiente potencia para enviar a las cuatro quintas partes de los países del mundo de vuelta a la Edad de Piedra", y que ha declarado abiertamente su intención de no permitir que ninguna otra nación desafíe su poder y supremacía.
Según la misiva, Washington ha ignorado "la incómoda verdad" de que otros estados demandantes se han implicado en actividades que violan los acuerdos multilaterales.
"Estados Unidos no está acostumbrado a admitir que está equivocado o que podría estarlo. Ni una palabra de perdón por la invasión en Irak bajo el pretexto de eliminar armas de destrucción masiva inexistentes...", dice la carta.
Oh considera que las acciones de EEUU pretenden obstaculizar la subida de China. "Lo entendemos, así que, por favor, dejen de hablar de principios elevados y del derecho internacional", indica.
Aconseja a Estados Unidos que envíe barcos para reafirmar su libertad de navegación dentro de las 12 millas náuticas del atolón en el Mar de Filipinas que Japón llama isla Okinotori y reclama como su territorio.
Japón utilizó el atolón, que no una isla, para declarar su zona económica exclusiva de 200 millas náuticas, que es mayor que todo el país y que no es reconocida por otros países de la región.
"Por eso, por favor, querido almirante, envíe allí al William P. Lawrence y deje que algunos de sus tripulantes pesquen cerca del atolón. Todos los que hasta ahora han visto con recelo la libertad de las expediciones de navegación en el Mar Meridional de China le aplaudirán", señala la carta.