Por Eloyza Guardia
RIO DE JANEIRO, Brasil, 25 abr (Xinhua) -- El director ejecutivo de deportes del Comité Olímpico de Brasil (COB), Marcus Vinicius Freire, admitió que la meta de estar entre los 10 países con mayor número de medallas es difícil, pero no imposible.
El directivo sostuvo en entrevista exclusiva con Xinhua que el COB trabaja para que los atletas locales sigan la tradición del país anfitrión de mejorar su posición en el medallero.
Recordó que la expectativa trazada en septiembre de 2009 cuando se eligió la ciudad de Río como sede los Juegos Olímpicos de 2016, fue ingresar en el grupo de los 10 países con el mayor número de medallas, independiente del color de la presea.
En Londres (2012) Italia quedó en la décima posición en el total de medallas con 28 preseas, 11 más que Brasil, mientras que Ucrania ocupó ese lugar en Beijing 2008 con 27 preseas, 13 más que Brasil.
Con base en estas comparaciones "hemos proyectado que bastará lograr un total de medallas cercano para esa meta", indicó Freire.
"Estamos ofreciendo a nuestros atletas la mejor preparación de todos los tiempos y los resultados obtenidos en los últimos tres años han demostrado que el deporte brasileño sigue evolucionando", expuso.
Entre 2013 y 2015, el deporte olímpico brasileño conquistó 67 medallas en campeonatos mundiales o competiciones equivalentes, cifra equivale a 27 preseas más que en el ciclo olímpico anterior.
Otro punto positivo es el aumento del número de modalidades presentes en los podios mundiales, que en los últimos tres años ha sumado 15 disciplinas, lo cual obliga a Brasil a concluir los Juegos Olímpicos de Río entre los 10 primeros en el total de medallas.
Sobre la formación de la delegación brasileña, Freire, quien integró la primera selección de voleibol brasileña que conquistó una medalla olímpica en Los Angeles 1984, dijo que por ahora el país tiene 428 cupos asegurados y cerca de 120 nombres definidos.
La gran disputa hasta julio será para saber quiénes serán los atletas que ocuparán las plazas y formarán parte de la delegación histórica que representara Brasil en los primeros Juegos Olímpicos en casa, añadió.
Para preparar la justa deportiva, Brasil invirtió en el ciclo olímpico (2012-2016) unos 700 millones de reales (198 millones de dólares al cambio actual), procedentes principalmente de la Ley Agnelo/Piva de 2001.
Dicha ley establece que 2 por ciento de la recaudación total de las loterías federales en operación en el país se destine al COB (85 por ciento) y el Comité Paralímpico Brasileño (15 por ciento).
Esta inversión incluye la contratación de entrenadores extranjeros.
"El COB considera la participación y experiencia de entrenadores calificados en el proceso de preparación de los atletas y equipos como fundamental para el éxito de campañas como los Campeonatos mundiales, los Juegos Olímpicos y los Juegos Panamericanos", dijo.
En este momento se tienen 40 técnicos extranjeros en 23 modalidades diferentes con los equipos brasileños, con resultados satisfactorios para la COB.
Entre las modalidades que mayor éxito han reportado está el canotaje, cuyo equipo nacional es dirigido por el español Jesus Mortán, que llevó Brasil a títulos inéditos.
Destaca también el ruso Alexandre Alexandrov, quien ha comandado la evolución de la gimnasia artística femenina, y el croata Ratko Rudik, uno de los entrenadores más victoriosos de la historia del polo acuático, quien puso al equipo brasileño entre los mejores del mundo.
Sobre cuáles son los deportes y atletas brasileños con más oportunidades de subir al podio, el director ejecutivo de deportes del COB prefirió no especificar.
"El COB no divulga estas informaciones para no presionar a los atletas ni desmerecer el trabajo y el esfuerzo de los demás", señaló Freire.
Recordó que en los últimos años los atletas nacionales llegaron al podio en nuevos deportes como balonmano, tiro con arco, canotaje, pentatlón y maratón acuático, lo cual amplía las posibilidades para Brasil.
La organización de los Juegos Olímpicos en casa tiene sus ventajas, pero al mismo tiempo genera presiones para los atletas.
Freire consideró que "los atletas de alto rendimiento están acostumbrados a la presión".
"Al competir en casa en Río 2016, vamos a tener una serie de factores que pueden beneficiar el desempeño de los atletas brasileños, como el clima, el apoyo de la afición, la proximidad de familiares y amigos", resaltó.
"Hemos reunido todos los meses aquí en el COB un consejo conformado por los mejores técnicos del país para discutir una serie de conductas que ayuden a minimizar la presión", expresó.
Dijo que al mismo tiempo "mantenemos un trabajo constante de un grupo de psicólogos junto a los atletas. Nuestro objetivo es valorar los puntos positivos y minimizar los negativos".
El COB lanzó campañas para acercar a la afición con la iniciativa "Time Brasil" con la finalidad de atraer al pueblo brasileño a las competiciones en todas las modalidades.
La estrategia incluye a la mascota "Ginga" y la elección de "padrinos", personalidades conocidas en varios sectores de la sociedad que comparten mensajes de apoyo a los atletas.
Brasil es conocido como el "reino del fútbol", por lo que Freire confió en que con la realización los Juegos Olímpicos de Río los brasileños conozcan y practiquen deportes más variados.
Freire sostuvo que todos los deportes se benefician con los Juegos Olímpicos, en particular el desarrollo del deporte nacional.
Ello se debe principalmente a la unión de la COB con el Ministerio del Deporte, confederaciones nacionales, Fuerzas Armadas, clubes y patrocinadores.
El COB ya tiene un plan estratégico luego de 2016, el cual incluye varias acciones de incentivo a nuevos atletas.
"Creo que el escenario deportivo nacional nunca más será el mismo después de la realización de los Juegos Olímpicos en Río de Janeiro", concluyó.