BUENOS AIRES, 14 abr (Xinhua) -- El presidente argentino Mauricio Macri se pronunció hoy a favor de la prohibición del servicio de taxi de la empresa estadounidense Uber, dispuesto por las autoridades de Buenos Aires.
"Es un nuevo desafío, pero remarco la decisión del gobierno de la ciudad de defender a nuestros taxistas, que son un símbolo de la ciudad" y de Argentina, declaró Macri a periodistas tras un acto en la localidad de Llavallol, en la periferia sur de Buenos Aires.
Uber comenzó a operar el martes pasado en la capital argentina, donde generó una amplia polémica con los sindicatos de los taxistas tradicionales, quienes denunciaron que este servicio representa una competencia desleal.
Los sindicatos de los taxistas tradicionales señalaron que los conductores que emplea Uber no tienen un registro profesional, no pagan impuestos y tampoco los seguros de rigor.
Los taxistas realizaron bloqueos callejeros en varias arterias de Buenos Aires, lo cual derivó en demoras en el tránsito y atascos.
La justicia de Buenos Aires suspendió el miércoles la actividad de Uber por operar sin los permisos legales.
Lo dispuso tras un reclamo del Sindicato de Peones de Taxis de la Capital Federal y ordenó la intervención del gobierno del alcalde Horacio Rodríguez del partido Propuesta Republicana (PRO, al cual también pertenece Macri) para suspender cualquier actividad que desarrolle Uber.
Ante este ordenamiento, grúas utilizadas para el arrastre de vehículos mal estacionados recorren la ciudad para llevarse a depósitos los automóviles vinculados a Uber.
Macri, en su discurso, celebró sin embargo el "avance de la tecnología" que supone la aplicación Uber para teléfonos inteligentes.
El sistema de Uber consiste en una aplicación instalada en teléfonos móviles inteligentes para que una central envíe un móvil a la dirección solicitada por el pasajero, previo registro del usuario con datos personales y de una tarjeta de crédito, a la cual se carga el gasto del viaje.
La tarifa base tiene un costo de 15 pesos (un dólar), a lo cual se agrega 4,5 pesos (30 centavos de dólar) por cada kilómetro recorrido y la tarifa por minuto es de 1,75 pesos (12 centavos de dólar).
El valor final se obtiene sobre la base de un algoritmo que combina esas dos variables.
El director de Operaciones de la aplicación de Uber en Argentina, Mariano Otero, declaró el pasado martes, en el inicio de operaciones de la compañía en Buenos Aires, su "felicidad" por el desembarco del sistema en Buenos Aires y auguró "un éxito rotundo".
El secretario de Transporte de Buenos Aires, Juan Méndez, señaló sin embargo que el servicio de Uber es "ilegal".
"Opera al margen de la ley. La empresa no presentó ninguna documentación para prestar servicio", agregó Méndez tras el inicio de operaciones de la empresa.