Se acelerará la reforma de los regímenes fiscal y tributario. Se impulsará la reforma de la repartición de las atribuciones operativas y las responsabilidades por los gastos entre la hacienda central y las territoriales, y se determinará racionalmente la proporción según la cual se distribuirán los ingresos del impuesto sobre el valor agregado entre el nivel central y los territoriales. A estos se les asignarán los impuestos que sean apropiados como fuente de ingresos y se les transferirán adecuadamente atribuciones en la administración de los asuntos tributarios. La magnitud de los pagos de transferencia especiales de la hacienda central se reducirá en mayor medida, mientras que la de los ordinarios aumentará este año un 12,2%. Se promoverá una reforma general encaminada a recaudar el impuesto sobre los recursos naturales calculado en función de sus precios. La recaudación y administración tributaria se aplicará según la ley. Se establecerá un mecanismo reglamentado de endeudamiento y financiación de los gobiernos territoriales, y se aumentarán conforme a los procedimientos legales y de manera apropiada las cuotas de deuda de los que cuenten con un poder fiscal fuerte y un riesgo de endeudamiento bajo. Los gobiernos de los diversos niveles deben persistir en llevar una vida frugal y utilizar cada centavo de manera trasparente y donde realmente se necesite.
Flexibilizar adecuadamente la aplicación de una política monetaria prudente. Se prevé que este año tanto la provisión de dinero en sentido amplio (M2) como el saldo de la financiación total para la economía real aumenten aproximadamente un 13%. Hay que emplear coordinadamente los diversos tipos de instrumentos de la política monetaria, entre ellos las operaciones de mercado abierto, los tipos de interés, el coeficiente de caja y los représtamos; mantener la liquidez en un nivel razonable y suficiente; desobstruir el mecanismo de conducción de dicha política; rebajar los costes de la financiación; e intensificar el apoyo a la economía real, especialmente a las pequeñas empresas, las microempresas y los "tres pilares del agro" [la agricultura, el campo y el campesinado].
Profundizaremos la reforma del régimen financiero. Aceleraremos la reforma y el perfeccionamiento del régimen moderno de supervisión y control financieros, elevaremos la eficiencia de los servicios financieros prestados a la economía real y lograremos que la supervisión y el control cubran todos los posibles riesgos financieros. Profundizaremos la reforma tendente a mercadizar los tipos de interés. Seguiremos perfeccionando el mecanismo de fijación de los tipos de cambio del yuan en función del mercado y mantendremos la estabilidad básica de estos en un nivel razonable y equilibrado. Profundizaremos la reforma de los bancos comerciales estatales y las instituciones financieras de desarrollo y de políticas, desarrollaremos los bancos no gubernamentales e iniciaremos la coactuación experimental de las inversiones en derechos accionariales y los créditos bancarios. Promoveremos la reforma del mercado de acciones y el de bonos, así como el fomento del imperio de la ley en ambos, impulsaremos el sano desarrollo del mercado de capitales en sus múltiples niveles y elevaremos el porcentaje de la financiación directa. Pondremos oportunamente en marcha el programa de conexión bursátil Shenzhen-Hong Kong. Estableceremos el sistema de seguros contra grandes catástrofes. Desarrollaremos de manera reglamentada las finanzas por internet. Desenvolveremos enérgicamente las finanzas incluyentes y las ecológicas. Intensificaremos la administración macroprudente de la deuda exterior en moneda tanto extranjera como china. Haremos más segura la "jaula" institucional, rectificaremos y reglamentaremos el orden financiero, combatiremos con dureza los fraudes financieros, las recaudaciones ilegales de fondos y las infracciones y delitos de los mercados bursátiles y de futuros, y garantizaremos con firmeza el cumplimiento de la exigencia mínima de evitar la aparición de riesgos sistémicos o regionales.
1. Intensificar la reforma estructural por el lado de la oferta y potenciar la fuerza motriz del crecimiento sostenido. Ciñéndonos a la resolución de las contradicciones y problemas destacados existentes en los ámbitos prioritarios, eliminaremos con celeridad los obstáculos derivados de los regímenes y mecanismos, elevaremos la calidad y la eficiencia del sistema de oferta mediante la reforma estructural por el lado de la oferta, y daremos un paso más en la activación del vigor del mercado y de la creatividad de la sociedad.
Impulsar el avance en profundidad de las reformas tendentes a simplificar la administración y descentralizar los poderes, a combinar la descentralización con el control y a optimizar los servicios. Hay que efectuar la simplificación administrativa con una actitud de respeto por el pueblo. Es menester transformar efectivamente las funciones gubernamentales y elevar su eficacia. Es necesario seguir reduciendo enérgicamente los asuntos sometidos al examen y la aprobación administrativos, hacer hincapié en la resolución del problema de la falta de sincronización, coordinación y completamiento en la descentralización de los poderes, y asegurarse de que las autoridades territoriales son capaces de tratar los asuntos descentralizados sujetos al examen y la aprobación, y de que los tratan como es debido. Se profundizará la reforma del sistema mercantil y se emprenderá la supresión experimental de la exigencia de tramitar tanto la licencia de funcionamiento como el permiso de gestión. Se publicarán las listas completas de las facultades y responsabilidades de los gobiernos territoriales, y en varias regiones se ensayará el sistema de listas negativas para el acceso al mercado. Se ejercerá la administración mediante catálogos y listas de los cobros administrativos e institucionales, de los cobros de las operaciones y servicios cuyos precios sean fijados u orientados por el Gobierno, de los fondos gubernamentales y de las competencias profesionales a nivel estatal. Se acelerará la formación de un sistema de mercado unificado, abierto, competitivo y ordenado, y se acabará con el proteccionismo local. Se profundizará la reforma de los precios y se fortalecerán la supervisión y la administración correspondientes. Se modificarán o abolirán los decretos administrativos y los documentos reglamentarios que obstaculicen el desarrollo. Es necesario innovar las formas de la supervisión y el control durante y después de la realización de algo, e implementar en todos los ámbitos la supervisión y el control mediante "dos elecciones aleatorias y una publicidad"; es decir, la elección aleatoria de los inspeccionados y la elección aleatoria para seleccionar y designar a los inspectores de la aplicación de la ley, y la publicidad oportuna de los resultados de la inspección y del tratamiento. Impulsaremos la reforma tendente a ejecutar la ley de manera coordinada en el desempeño administrativo y llevaremos a cabo la agrupación unificada de la información sobre la credibilidad de las empresas, su publicación con arreglo a la ley, la imposición conjunta de sanciones ejemplarizantes y la supervisión por parte de la sociedad. Generalizaremos enérgicamente los servicios administrativos a través de la Internet+, al objeto de que los diversos departamentos puedan compartir datos y de que las masas populares y las empresas puedan gestionar sus asuntos fácilmente, sin necesidad de acudir a muchos departamentos y evitando resquemores. Se eliminarán los reglamentos y sistemas prolijos, y se prohibirán las ilegalidades, de manera que las masas populares disfruten de una mayor igualdad de oportunidades y dispongan de espacios más amplios para la creación.
Liberar plenamente la capacidad latente emprendedora e innovadora de la sociedad. Hay que poner el acento en ejecutar la estrategia de un desarrollo propulsado por la innovación, promover la integración profunda de la ciencia y tecnología con la economía, y mejorar la calidad y competitividad de la economía real en su conjunto. Primero: es menester potenciar el protagonismo de las empresas en la innovación. Pondremos en práctica tanto la deducción ponderada de los gastos de las empresas en investigación y desarrollo como la política de depreciación acelerada, y perfeccionaremos las políticas tributarias preferenciales, entre ellas las políticas en favor de las empresas de altas y nuevas tecnologías y de las incubadoras de empresas científicas y tecnológicas. Apoyaremos a las empresas líderes en sus campos para que establezcan centros de investigación y desarrollo de alto nivel. Extenderemos de manera acelerada a todo el país las políticas relativas al ensayo de las zonas demostrativas estatales de la innovación independiente y estableceremos más zonas de este tipo y parques de altas y nuevas tecnologías.