Por Edna Alcántara
MEXICO, 17 mar (Xinhua) -- Académicos, políticos, legisladores, así como la sociedad mexicana en general, expresan cada vez más su preocupación de que en las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos, su país vecino y con más relación comercial, llegue al Poder el aspirante republicano Donald Trump, pues ésto, temen, afectaría severamente las relaciones bilaterales.
"Estoy convencido que Donld Trump quedará como candidato republicano y por el lado demócrata Hillary Clinton. Esperamos gane la democracia pues eso sería un relanzamiento de las relaciones de Estados Unidos con México y América Latina", así lo percibió Javier Zarco Ledesma, coordinador del Centro de Relaciones Internacionales de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Si bien, las elecciones presidenciales en EEUU se celebrarán el próximo 8 de noviembre, desde junio del año pasado inició la temporada fuerte de precampañas donde siguieron 16 precandidatos del Partido Republicano y cinco del Demócrata, así como dos independientes y conforme se reduce la fecha, el camino a la Casa Blanca se hace cada vez más corto.
Los más fuertes son la exsecretaria de Estado Clinton y precisamente el multimillonario Donald Trump. Ambos aunque les falta un camino por recorrer para ser declarados candidatos oficiales, ya han ganado siete estados estadounidenses.
La preocupación de México es Trump, quien ha llevado desde el principio y hasta la fecha un discurso totalmente antimigrante y racistas, acompañado de propuestas diversas tales como el confiscar las remesas hacia México si las autoridades de este país no pagan la construcción de un muro fronterizo, hasta su intención de imponer aranceles a productos mexicanos del sector automotriz, entre otros.
De igual forma, tachó a los migrantes mexicanos como criminales y hasta violadores, y ha prometido deportar a 11 millones de indocumentados que viven en Estados Unidos.
"Sería catastrófico para Estados Unidos y para la relación bilateral, sería el triunfo de la irracionalidad y el inicio de una nueva era en el desarrollo de las relaciones internacionales y bilaterales", dijo en entrevista el presidente de la Cámara de Diputados de México, Jesús Zambrano Grijalva.
Para el diputado izquierdista, las promesas que ha hecho el político republicano "atentan contra los mexicanos", puesto que "lo único que han hecho es despertar a los demonios del odio" y además, "despiertan las más bajas pasiones que hay en un sector de la sociedad norteamericana contra otro sector que ha ayudado a construir la grandeza de ese país".
En concordancia con este sentir, la extesorera de Estados Unidos, la mexicana Rosario Marín, tildó a Trump como un individuo enloquecido y soberbio, que en su afán de hacerse del poder, al más puro estilo fascista, pretende provocar sentimientos xenófobos y racistas, en particular en contra de los mexicanos.
La también defensora de los indocumentados y quien recibió en México el reconocimiento "Elvia Carrillo Puerto" por su destacada labor altruista y política, consideró que la posible candidatura de Trump a la presidencia de Estados Unidos se levanta como una "amenaza funesta de un supuesto liderazgo portador de las más repudiables conductas populistas que haya conocido la humanidad".
México considera estratégica su relación con Estados Unidos, un país con el que alcanzó en 2015, de acuerdo a cifras oficiales, un intercambio comercial por arriba de los 496.000 millones de dólares, haciendo de ese país el primer destino de las exportaciones mexicanas y fuente prioritaria de las importaciones que realiza México.
No obstante, para el ministro mexicano de economía, Idelfonso Guajardo Villarreal, de llegar Trump a la Casa Blanca, habría afectaciones no solo para México sino también para la Unión Americana por el estrecho vínculo comercial y productivo entre ambas naciones.
De acuerdo con el funcionario mexicano, además de su discurso "proteccionistas" y "xenofóbico" de Trump, su plan para aplicar aranceles a los productos del sector automotriz y frescos, terminarían dañando la relación comercial, pero más, dijo, a los consumidores estadounidenses.
"Esperemos que al final del día la razón prevalezca y América del Norte siga en la integración que inició hace 20 años", expresó ante empresarios de la Cámara Americana de Comercio (American Chambers) en el marco de su 99 Asamblea Anual la noche de este martes.
Al margen de los discursos del controvertido candidato republicano, los gobiernos de México y Estados Unidos, hasta este miércoles destacan la buena relación bilateral.
El secretario mexicano de Gobernación (Interior), Miguel Ángel Osorio Chong, realizó este día una visita de trabajo en el país vecino del norte, para reunirse con el secretario de Seguridad Interior de Estados Unidos, Jeh Johnson.
Ahí, el funcionario mexicano sostuvo que la relación con Estados Unidos está por encima de discursos e incluso de personas, esto en alusión a los ataques de Trump en contra de México y los mexicanos.
El pasado 25 de febrero se celebró en este país latinoamericano la Tercera Reunión del Diálogo Económico de Alto Nivel (DEAN) entre México y Estados Uinidos al más alto nivel y en el que asistió el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden.
En aquella ocasión, aunque el alto funcionario estadounidense habló de las buenas relaciones bilaterales, también reconoció que en su país, durante la campaña presidencial existe mucha retórica dañina e inacertada, que hablan de los inmigrantes mexicanos, y por tal, se dijo obligado a pedir disculpas.
Ayer, martes, Trump quien logró una victoria crucial en Florida, y donde se contendía por 99 delegados en el mayor premio del día, con lo que derrotó a su mayor rival del partido, el senador Marco Rubio, mantuvo su discurso nacionalista y arremetió una vez más contra los indocumentados mexicanos.
Según el calendario, todavía faltan 14 votaciones para que las candidaturas sean definitivas.
"Desafortunadamente la forma que ha llevado Trump su campaña le ha favorecido pero aún falta y hay que esperar y gane el Partido Demócrata. Sin embargo, al margen de ello, existe una agenda de la política económica y exterior que debe llevar Estados Unidos, lo que sin duda obliga a ese país a replantear sus relaciones con América Latina y particularmente con México", reconoció en declaraciones a Xinhua el académico y analista político Zarco Ledesma.
Para el especialista aunque eso deberá tomarse después de las elecciones presidenciales y que entrarán en algún momento en la nueva agenda de ese gobierno, existen otros temas como la migración que serán difíciles de resolver entre ese país y la región.
"No creo que el tema migración se resuelva; ese tema va a seguir pendiente pues existe un sistema bastante serio y complejo en términos de la migración de latinos por propia situación de la región por falta de oportunidades y empleos", finalizó.