En 2014, un seguidor local obsequió una cabeza de buda a Hsing Yun, fundador de la orden budista Fo Guang Shan en Taiwan.(Xinhua/Li He)
BEIJING, 26 feb (Xinhua) -- Durante cerca de 1.500 años, la estatua de Buda de 47 centímetros de alto en la torre del Templo Youju, en la provincia norteña china de Hebei, dio al templo un matiz de la dinastía Qi del Norte.
La figura de mármol blanco, realizada por orden de un emperador de la dinastía Qi del Norte alrededor del año 556, representaba una obra de vanguardia en esa época.
Los arqueólogos creen que para evitar que la estatua fuera robada, la puerta de la torre deliberadamente fue hecha más chica que la estatua.
Ese plan pareció funcionar hasta 1996, cuando cuatro ladrones le cortaron la cabeza y la vendieron en el extranjero. Los ladrones fueron atrapados poco después, pero la cabeza no fue encontrada.
En 2014, un seguidor local obsequió una cabeza de buda a Hsing Yun, fundador de la orden budista Fo Guang Shan en Taiwan. Hsing Yun pidió a las autoridades del patrimonio cultural de la parte continental china que le ayudaran a encontrar el cuerpo al que pertenecía esa cabeza.
Eso provocó que Liu Jianhua, una de las arqueólogas que se suponía cuidaba al buda cuando su cabeza fue cortada, hiciera un viaje a Taiwan. Al momento de ver la cabeza, supo de qué se trataba.
El maestro Hsing Yun decidió completar la estatua, y en mayo pasado, el cuerpo fue transportado a la isla para que se le colocara la cabeza. El viernes, el budista de 90 años escoltó personalmente la cabeza a la parte continental.
"El mar no puede cortar nuestro vínculo histórico, ni puede cortar nuestra conexión y linaje de sangre", mencionó Hsing Yun. "Nuestras tradiciones culturales chinas comunes no pueden ser cortadas por fuerzas externas".
La estatua completa será exhibida en el Museo Nacional de China el 1 de marzo antes de ser trasladada a un museo en Hebei.