Desde el lanzamiento de la ZLC de Shanghai en 2013, China ha probado varias políticas nuevas, que incluyen la gestión de lista negativa en la inversión extranjera, políticas comerciales y financieras preferenciales y la apertura de más industrias a los inversionistas extranjeros.
Las autoridades locales y las instituciones financieras deben continuar llevando a cabo medidas efectivas de reajuste, apoyando la apertura del mercado de capitales para el mundo y mejorando el mecanismo de supervisión y regulación para la industria financiera, indicó Li.