Además, el primer ministro propuso que los países de la región amplíen el diálogo y los intercambios para promover la coexistencia armoniosa de las diferentes civilizaciones.
En cuanto a las disputas del Mar Meridional de China, Li planteó una propuesta de cinco puntos para defender y promover la estabilidad en el concurrido cuerpo de agua y pidió a los países ajenos a la región abstenerse de emprender acciones que puedan causar tensión.
Otros líderes de la cumbre coincidieron con que la Cumbre del Este de Asia debería desempeñar un mayor papel en la profundización de la confianza política y de las relaciones económicas de la región.
Los líderes expresaron su creencia de que los países pertinentes comparten la voluntad de implementar con sinceridad la Declaración sobre la Conducta de las Partes en el Mar Meridional de China y de promover la negociación de un código de conducta.