El nuevo parque está rodeado de las islas Desventuradas de San Ambrosio y San Félix, así como de los islotes González y Roca Catedral.
El área protegida equivale al 40 por ciento del territorio continental chileno y es circundante a la mundialmenta conocida isla de Pascua por sus enormes estatuas moais.
La zona cuenta con las únicas fuentes hidrotermales en aguas nacionales, además de que su temperatura y composición mineral permite que puedan vivir numerosas especies en ambientes extremos.
En estas islas desovan muchas especies de peces como atunes, tiburones, marlines y pez espada, por lo que su protección permitirá conservar más de 140 variedades.
La mandataria chilena expresó que estos compromisos significarán la protección de más de 1 millón de kilómetros cuadrados, "constituyéndo en conjunto uno de los espacios de protección marina más grande del mundo".