CARACAS, 21 ago (Xinhua) -- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, decretó este viernes un estado de excepción por 60 días prorrogables en cinco municipios del estado occidental del Táchira, fronterizo con Colombia, tras el auge de la violencia paramilitar en los límites con el vecino país.
"Este estado de excepción lo decreto obligado por las circunstancias del ataque masivo contra la República Bolivariana de Venezuela, del crimen transnacional, del narcotráfico, los paramilitares y las bandas criminales", afirmó Maduro.
El jefe de Estado venezolano delegó al gobernador tachirense, José Vielma Mora, la responsabilidad de direccionar las acciones necesarias "para restablecer el orden" en la zona, luego de producirse recientemente un ataque "paramilitar" en contra de tres militares venezolanos y un civil.
Maduro anunció la prolongación del cierre de la frontera con Colombia por San Antonio del Táchira y el poblado de Ureña, a escasos 52 kilómetros de San Cristóbal (capital de la entidad), hasta que sean capturados los dos sujetos que propiciaron la emboscada contra los efectivos de la Fuerza Armada.
"He decidido prolongar más allá de 72 horas el cierre de esta frontera. Esa frontera queda cerrada hasta nuevo aviso, hasta que capturemos a los asesinos", apuntó Maduro, quien además aseguró que este atentado fue premeditado por grupos de la derecha colombiana.
El estado de excepción que persigue "extirpar los focos de paramilitarismo" involucra a los municipios contiguos de Bolívar, Ureña, Junín, Capacho, Libertad y Capacho Independencia, todos pertenecientes a la entidad tachirense.
El mandatario suramericano firmó el decreto presidencial que activa este mecanismo constitucional, y se lo entregó a la autoridad del Poder Legislativo, Diosdado Cabello, a fin de que el mismo sea evaluado por los diputados del Parlamento.
El dignatario venezolano giró instrucciones a la canciller, Delcy Rodríguez, para que coordine una reunión inmediata con las autoridades colombianas a fin de abordar la situación de violencia que padece la región fronteriza.
Rodríguez se reunió hoy con su homóloga colombiana, María Angela Holguín, en Costa Rica, un encuentro que fue calificado por el presidente Maduro como "muy positivo".
Agregó que aspira tratar este tema con su par neogranadino, Juan Manuel Santos, a quien le pidió la máxima colaboración para enfrentar los ataques que perpetran las bandas criminales en contra de los pueblos de Colombia y Venezuela.
Por otra parte, el dignatario venezolano denunció que grupos de la derecha local e internacional lideran una campaña en la que pretenden catalogarle de xenófobo y hostil hacia el pueblo de Colombia.
"No soy anti-colombiano (...) estar en contra del contrabando, el paramilitarismo y el ataque a la moneda, no es ser anti-colombiano", afirmó Maduro.
Rechazó los pronunciamientos del ex presidente colombiano, Alvaro Uribe Vélez, quien la víspera lo calificó como "un fracasado en apuros", al tiempo que criticó la suspensión del paso fronterizo por el estado Táchira (occidente).
Uribe anunció vía Twitter sobre su estadía en el Departamento de Arauca (este de Colombia), límite con Venezuela, por lo que el mandatario suramericano lo acusó de coordinar crímenes y asesinatos contra Caracas.
"Ya desde Colombia se me ataca, aquí está el cínico, el rey de los falsos positivos y de las masacres, Alvaro Uribe", expresó Maduro al tiempo que reiteró la prevalencia de una campaña en su contra proveniente de Miami, Colombia y Venezuela.
Asimismo, fustigó las declaraciones del opositor venezolano, Henry Ramos Allup y de la directiva de la Organización No Gubernamental (ONG) Provea, a la cual acusó de servir a los intereses del gobierno de Estados Unidos.
Luego de conocerse el pasado jueves sobre la agresión con armas largas hacia tres efectivos castrenses y un civil en la frontera con Colombia, el Estado venezolano desplegó un intenso operativo en Táchira (occidente) orientado a neutralizar las bandas paramilitares y criminales.
Por ello, este viernes arribaron a la región limítrofe 1.500 nuevos soldados del Ejército y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) que se suman a los 2.500 que ya operaban en la zona.