BEIJING, 16 ago (Xinhua) -- La introducción a nivel nacional de un impuesto sobre los bienes inmuebles residenciales en China supondrá ingresos más estables, sostenibles y diversos para los gobiernos locales, según dijo Fitch en su último informe.
China incluyó a principios de este mes la discusión de un impuesto similar en su plan legislativo quinquenal, después de que se hubiera puesto a prueba en Shanghai y Chongqing desde 2010.
La medida no sólo ofrecerá finanzas más sostenibles y fuentes de impuestos diversificados, sino que también reducirá la dependencia de los gobiernos locales de la venta de tierras, que ha sido, hasta ahora, su principal fuente de ingresos, y disminuirá la volatilidad de sus ingresos, sobre todo durante las recesiones del sector inmobiliario, indica el informe.
Además, asegurar fuentes de ingresos tributarios más sostenibles es clave para aquellos gobiernos locales cuya tasa de crecimiento se sitúa entre el 6 y el 7 por ciento.
Fitch espera que el impuesto sobre los bienes inmuebles residenciales se aplique gradualmente en todo el país, si bien se necesitará tiempo para poner a punto el proceso administrativo y las políticas.
El informe apunta que la falta de un banco de datos de registro residencial nacional en China podría suponer un gran desafío a la hora de aplicar el impuesto.