El jugador ucraniano, Yevhen Konoplyanka, logró darle esperanza a Sevilla al marcar al minuto 80, con lo que el encuentro se igualaba 4-4 y obligaba a los equipos a disputar la prórroga.
En tiempos extra, le faltó suerte a ambos equipos, hasta que al minuto 114, a seis minutos de que se acabara el encuentro, el jugador del cuadro catalán, Pedro, metió el balón en la portería sevillista para establecer un impresionante 5-4 en una final europea.