MÉXICO, 22 ago (Xinhua) -- En pleno siglo XXI, los ecos de viejas invasiones siguen resonando en América Latina, en tanto los principios del derecho internacional, nacidos hace más de tres siglos para contener la violencia entre Estados, se ven hoy amenazados por la persistencia de prácticas de fuerza e imposición, advirtió el historiador mexicano Faustino Amado Aquino.
En entrevista reciente con Xinhua, el investigador del Museo Nacional de las Intervenciones de México recordó que la noción de "intervención" se consolidó en Europa a partir del siglo XVII con juristas que identificaron que "una de las principales causas de las guerras es que unos países pretenden inmiscuirse en los asuntos internos de otros Estados".
Esa intromisión, agregó, atentaba contra "el derecho de los pueblos y las naciones a autogobernarse y resolver sus asuntos internos como ellos quisieran".
El especialista explicó que antes de estas teorías imperaba únicamente la ley del más fuerte. "Yo te ataco porque tengo la fuerza para hacerlo. Y el derecho de conquista: yo invado tu territorio y me lo quedo porque tengo el poder. Eso era lo único que existía: la ley del más fuerte y el derecho de conquista", señaló.
El investigador advierte que "Parece que la dura lección de la Segunda Guerra Mundial se está olvidando, porque tenemos fantoches, fanfarrones como Donald Trump (presidente de Estados Unidos), que adoptan actitudes tiránicas e imperiales", declaró.
Aquino subrayó que México ha sido blanco en los últimos años de presiones externas. Refirió que, en 2019, Washington exigió al Gobierno mexicano detener el flujo migratorio y militarizar la frontera, o de lo contrario impondría aranceles.
"Eso es coacción y fue una intervención en toda regla", enfatizó, añadiendo que históricamente Estados Unidos ha buscado justificar su intromisión en la región con doctrinas como la Monroe.
Si en sus orígenes, en el siglo XIX, buscaba frenar a la Santa Alianza europea, "después la Doctrina Monroe se convirtió en un instrumento para convertir a Hispanoamérica en el patio trasero de los Estados Unidos".
Para Aquino, cualquier violación de la soberanía de una nación debe entenderse como intervención. "Si mandan tropas, estarían violando la soberanía territorial de México, y eso sería una intervención", precisó.
A tono con ello, cada septiembre, el Museo Nacional de las Intervenciones conmemora la lucha contra la invasión estadounidense a México (1846-1848).
"El aniversario del museo se festeja justo en el mes en que se da la invasión estadounidense. El 13 de septiembre fue el ataque al Castillo de Chapultepec con tropas estadounidenses, en 1847. Entonces, todo el entorno del museo está muy vinculado al tema de la intervención", recordó Aquino.
Asimismo, cada 20 de agosto se conmemora en el Museo Nacional de las Intervenciones un nuevo aniversario de la Batalla de Churubusco, episodio crucial de la intervención estadounidense en territorio mexicano.
En la Batalla de Churubusco, soldados nacionales mexicanos y voluntarios irlandeses resistieron heroicamente frente al ejército invasor. El escenario de la ceremonia de conmemoración cada año es el museo y antiguo convento, que todavía conserva en sus muros las huellas del combate.
En tal sentido, Aquino insistió en que la historia sigue siendo clave para comprender las tensiones actuales. "Dicen que la historia no se repite, pero sí se reedita", afirmó.
Concluyó que el estudio del pasado no sea un mero ejercicio académico, sino una guía para entender los riesgos presentes. Las intervenciones extranjeras, aunque cambiaron de forma, mantienen la misma esencia: la imposición de la voluntad del más fuerte.