Una persona ondea una bandera boliviana luego de la renuncia presidencial de Evo Morales, en La Paz, Bolivia, el 10 de noviembre de 2019. Morales anunció el domingo su renuncia al cargo, al igual que el vicepresidente Alvaro García Linera, y que deja el gobierno pese a ganar las elecciones del 20 de octubre pasado.(Xinhua/Meagan Hancock)
Por René Quenallata Paredes
LA PAZ, 10 nov (Xinhua) -- La renuncia del presidente Evo Morales provocó en varias ciudades de Bolivia una espiral de saqueos y quemas de negocios e inmuebles de autoridades y dirigentes políticos.
Morales, en el anuncio de su renuncia, había pedido que cese la violencia, se deje de agredir a los indígenas, mujeres de pollera y que no se quemen las casas de las autoridades nacionales, departamentales y municipales, además de los legisladores.
Varias autoridades renunciaron ante el constante hostigamiento de la gente de la oposición que luego de saquear las pertenencias procedieron a quemar los inmuebles. En otros casos incluso tomaron de rehén a sus familiares, lo que motivó a la espiral de renuncias de autoridades.
Bolivia, con las renuncias del presidente Morales, el vicepresidente Álvaro García Linera, los presidentes de las cámaras legislativas, ministros, alcaldes, muchos agobiados por la presión social que se había asomado a sus casas decidieron dimitir, quedó sin gobierno.
Con la policía amotinada y los militares replegados en sus cuarteles, grupos de personas salieron por las calles a sembrar terror por las calles de las ciudades de El Alto y La Paz.
Por la mañana, el círculo más cercano del presidente Evo Morales comenzaron las renuncias. El presidente de la Cámara de Diputados, Víctor Borda, y su colega David Ramos dimitieron denunciando ataques a sus familiares y bienes, con lo que ya sumaban una decena legisladores renunciantes. Más tarde, tomó similar decisión el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, y antes ya lo había hecho su colega de Minería, César Navarro.
En el caso de Borda y Navarro, anunciaron la determinación tres denunciar que sus viviendas fueron incendiadas por grupos vandálicos movilizados en Potosí, que incluso pusieron en riesgo la vida de sus familiares.
Navarro, en un contacto con una televisora, dijo que su renuncia se debe a que está afectado emocionalmente y porque la integridad de su familia se vio en riesgo.
Personas festejan luego de la renuncia presidencial de Evo Morales, en La Paz, Bolivia, el 10 de noviembre de 2019. Morales anunció el domingo su renuncia al cargo, al igual que el vicepresidente Alvaro García Linera, y que deja el gobierno pese a ganar las elecciones del 20 de octubre pasado.(Xinhua/Meagan Hancock)
Borda, ahora expresidente de la Cámara de Diputados, también hizo conocer su renuncia tras denunciar que un grupo de personas quemó su casa y tomó como rehén a su hermano.
La ministra de Culturas, Wilma Alanoca, a través de los medios, responsabilizaba a Fernando Camacho de los cívicos cruceños y al líder opositor Carlos Mesa. "Me está amedrentando, también mi familia es víctima", aseveró.
En El Alto atacaron a la empresa Sofía, luego tomaron las estaciones del teleférico y atacaron barrios enteros.
Atacaron dependencias de la Alcaldía alteña, la casa de la alcaldesa Soledad Chapetón, la casa del padre de la burgomaestre y viviendas particulares.
Posteriormente en La Paz comenzaron a atacar el patio de los buses PumaKatari en la zona sur de Chasquipampa, quemaron módulos policiales y prendieron fuego del rector de la UMSA, Waldo Albarracín, uno de los principales promotores de estas movilizaciones de la oposición.
Los canales Televisión Universitaria, Red UNO, además del periódico Página Siete tuvieron que cerrar sus emisiones debido a amenazas de ataques por parte de seguidores de Evo Morales.
Personas festejan luego de la renuncia presidencial de Evo Morales, en La Paz, Bolivia, el 10 de noviembre de 2019. Morales anunció el domingo su renuncia al cargo, al igual que el vicepresidente Alvaro García Linera, y que deja el gobierno pese a ganar las elecciones del 20 de octubre pasado.(Xinhua/Meagan Hancock)
Los dirigentes de la Federación de Juntas Vecinales de El Alto (FEJUVE) dieron plazo de 48 horas para que los cívicos de Santa Cruz Fernando Camacho, de Potosí Marco Pumari, el rector de la UMSA Waldo Albarracín y el opositor Carlos Mesa para que abandonen La Paz, de lo contrario no se iban a responsabilizar por sus vidas.
Cerca de la media noche salieron algunos camiones a las calles algunos contingentes militares y policiales para tomar el control y se espera que en las próximas horas se pueda definir la salida al vacío de poder que vive Bolivia, ante la renuncia del Ejecutivo y varias autoridades del legislativo.