La foto tomada el primero de junio del año presente muestra a una mujer uygur en pie en el portal de su casa recién construida en la aldea Cele del pueblo del mismo nombre ubicado en el borde sureño del desierto Taklimakan en la región autónoma uygur de Xinjiang.
El pueblo retrocedió hacia el sur tres veces a lo largo de los cien años últimos debido al avance del desierto. Durante los últimos decenas de años, árboles como granada, azufaifo y nogal se vienen plantando en el pueblo, medida con la que el ingreso per cápita anual de los granjeros aumentó desde apenas 1.000 yuanes (154 dólares)en el pasado hasta 5.732 yuanes (882 dólares) en la actualidad. (Xinhua/Shen Qiao)