Aunque reconoció que la política de expansión cuantitativa es indispensable para evitar que la economía mundial caiga en la recesión, Li señaló que por sí misma no es suficiente para una recuperación sólida.
El premier chino abogó por más cooperación internacional en capacidad de producción, lo que implica la incorporación de instalaciones, equipos, tecnología y experiencia gestora de otros países para reducir con eficacia los costes de construcción, crear empleos para las comunidades locales y promover el desarrollo de las industrias domésticas.
China está lista para llevar a cabo una cooperación tripartita con vistas a combinar las ventajas de fabricación de su país con las tecnologías avanzadas de los países desarrollados y la enorme necesidad de crecimiento de los países en desarrollo, dijo Li, añadiendo que "esto beneficiará a las tres partes".