Pero la imagen de un país europeo con controles de capital no fue positiva para Grecia y la eurozona.
"Este es un lunes negro para la visión de la Unión Europea. El principio fundamental de la transferencia de capital ha sido anulado. Los controles de capital serán impuestos durante un periodo limitado, pero mientras tanto la economía estará inactiva", dijo el economista Dimitris Tsagaris.
El experto dijo que el hecho de que los controles de capital se hayan impuesto por segunda ocasión en tres años en la eurozona constituye un duro golpe a la zona europea de la moneda única.
Por decreto gubernamental, los bancos y la Bolsa de Valores de Atenas permanecerán cerrados hasta el 6 de julio. Los griegos que se formen frente a los cajeros automáticos para retirar efectivo se enfrentarán a partir de ahora al límite de 60 euros diarios.
Hoy por la noche, el Ministerio de Finanzas de Grecia rechazó los informes de los medios en el sentido de que el límite se reducirá a 20 euros diarios.