El subdirector también declaró que alrededor de 10.000 personas han sido vigiladas desde el comienzo del brote e indicó que actualmente 6.500 individuos son monitoreados como medida preventiva.

Aunque el brote en República de Corea está asociado con la transmisión del virus en instalaciones de salud, Fukuda explicó que no sería extraño que los futuros contagios ocurrieran fuera de este entorno.

"Incluso dada esta posibilidad, en este momento no vemos ninguna evidencia de que el virus esté causando una transmisión sostenida", dijo Fukuda, a pesar del desconocimiento existene en cuanto a la forma en que se transmite el virus entre las personas.

Además de pedir una investigación continua, Fukuda también señaló lo importante que es mantener altos niveles de vigilancia y supervisión, incluso si el número de casos parece disminuir.

Identificado por primera vez en Arabia Saudí en 2012, el MERS tiene una tasa de mortalidad de cerca de 36 por ciento, según la OMS.

Al parecer, el virus causa síntomas más severos en los ancianos y en aquellos con sistemas inmunológicos debilitados y con enfermedades crónicas como cáncer, enfermedades pulmonares y diabetes.