EL CAIRO/ JARTUM, 2 abr (Xinhua) -- El ministro egipcio de Relaciones Exteriores, Sameh Shoukry, viajó hoy a Kinshasa, capital de República Democrática del Congo, para una nueva ronda de conversaciones sobre la controvertida presa de Etiopía en el Nilo.
En una declaración, la cancillería egipcia dijo que Shoukry, junto con el ministro de Aguas de Egipto, viajó a Kinshasa por invitación de República Democrática del Congo, presidente actual de la Unión Africana, para una nueva ronda de conversaciones sobre la Gran Presa del Renacimiento Etíope (GERD, por sus siglas en inglés).
Por otra parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Sudán anunció que una delegación ministerial sudanesa, también encabezada por la ministra de Relaciones Exteriores y el ministro de Agua del país, tiene previsto viajar el sábado a Kinshasa.
"La ministra de Relaciones Exteriores de Sudán, Mariam Al-Sadiq Al-Mahdi, y el ministro de Irrigación y Recursos Hídricos, Yasir Abbas, partirán el sábado a la capital congolesa de Kinshasa para las reuniones sobre la presa etíope del renacimiento, bajo el patrocinio de República Democrática del Congo, actual presidente de la Unión Africana" , indicó el ministerio en una declaración.
"La delegación sudanesa participa en esta ronda para identificar la metodología y trayectorias de las conversaciones y alcanzar un acuerdo al respecto con el fin de garantizar negociaciones constructivas que superen el estancamiento que ha caracterizado a las conversaciones en los últimos meses" , añadió.
De acuerdo con la declaración, las conversaciones discutirán la propuesta de Sudán sobre un cuarteto de mediación formado por la ONU, la Unión Europea, Estados Unidos y la Unión Africana para ayudar a las tres partes a alcanzar un acuerdo legal vinculante para el llenado y operación de la GERD.
Sudán, Egipto y Etiopía han entablado conversaciones durante años sobre los asuntos técnicos y legales relacionados con el llenado y operación de la GERD.
Etiopía empezó a construir la GERD en 2011 y espera generar más de 6.000 megavatios de electricidad con la presa. Egipto y Sudán, países ubicados aguas abajo en la cuenca del Nilo que dependen del río para obtener agua dulce, temen que la presa pueda afectar su cuota de recursos hídricos.