Una integrante del Equipo de Voluntarios Chinos entrega a un hombre un kit con elementos de protección e higiene contra la enfermedad causada por el nuevo coronavirus (COVID-19), en la avenida Rivadavia, en la ciudad de Buenos Aires, Argentina, el 7 de febrero de 2021. La comunidad china en la ciudad de Buenos Aires, capital de Argentina, dio muestras una vez más el domingo de la tradicional solidaridad que la caracteriza, con la entrega de elementos de protección e higiene contra la COVID-19, a la espera de la llegada del Año Nuevo Lunar, el próximo 12 de febrero. (Xinhua/Martín Zabala)
BUENOS AIRES, 7 feb (Xinhua) -- La comunidad china en la ciudad de Buenos Aires, capital de Argentina, dio muestras una vez más este domingo de la tradicional solidaridad que la caracteriza, con la entrega de elementos de protección e higiene contra la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19), a la espera de la llegada del Año Nuevo Lunar, el próximo 12 de febrero.
La actividad estuvo organizada por el Equipo de Voluntarios Chinos en el país sudamericano, y reunió a cientos de personas en el emblemático barrio de Once, al este del centro geográfico de la ciudad capital.
Los voluntarios entregaron insumos de seguridad e higiene a miembros de la comunidad china, como barbijos, alcohol en gel y guantes.
Además, a manera de pequeña celebración anticipada del Año Nuevo Lunar, expertos realizaron carteles con la tradicional caligrafía china, símbolo de sabiduría ancestral, y repartieron no sólo comida típica del país asiático, sino también obsequios a los niños y a los adultos mayores.
"Estoy participando de la campaña de donaciones solidarias de la comunidad china. El otro día se hizo en el barrio chino de Belgrano (norte) y hoy en el barrio chino de Once. Y decimos barrio chino de Once porque ya hay tanta comunidad china viviendo aquí que también lo hemos incorporado como barrio chino", dijo a Xinhua el voluntario Nicolás Damin.
El hombre es sociólogo y doctor en Ciencias Sociales por la Universidad de Buenos Aires, en la cual es investigador del Centro de Estudios Argentina-China.
"El principal objetivo (de la actividad) es tener un espacio de encuentro de la comunidad china en este momento tan difícil que tenemos por la COVID-19, que no podemos reunirnos a comer", explicó Damin.
El voluntario remarcó que "en la calle, en el espacio público, con distanciamiento y medidas de seguridad, nos juntamos para celebrar el Año Nuevo Chino y hacer una donación de objetos de salud".
Dentro de los insumos entregados se incluyeron tapabocas, guantes quirúrgicos, alcohol en gel, toallas sanitizantes y una medicina tradicional efectiva para la prevención del coronavirus SARS-CoV-2, causante de la COVID-19, en adultos mayores de 65 años.
La propuesta dominical incluyó además "un obsequio a los más pequeños y a los más ancianos, que merecen nuestro respeto y acompañamiento", destacó Damin.
Entre otros platos, se ofrecieron las tradicionales empanadas "jiaozi", preparadas para recibir al año del Buey, que ha estado precedido por el año de la Rata.
El voluntariado está integrado por alrededor de 50 personas, en su mayoría jóvenes chinos, que en otras ocasiones han distribuido insumos sanitarios, tanto a familias chinas como argentinas, pero, además, han realizado entregas masivas de juguetes a niños de los barrios porteños más desfavorecidos.
"La actividad solidaria que se hace, un día domingo, de sol, nos parece importante, y aquí varios voluntarios de la Universidad (de Buenos Aires) estamos colaborando para acercarnos", resaltó Damin.
El hombre enfatizó que "somos todos parte del mismo país, de la misma ciudad, y ése es un mensaje importante que hay que transmitir".
La capital argentina se ha convertido en los últimos años en una referencia por la atención que se da a la celebración del Año Nuevo Chino.
Previo a la pandemia, la Fiesta de la Primavera movilizaba en Buenos Aires a más de 100.000 personas, en una tradición que sobrepasa los límites de la comunidad china en el país.