BUENOS AIRES, 18 ene (Xinhua) -- China cerró el 2020 con un resultado positivo y una óptima recuperación en el terreno económico gracias a una buena gestión de la crisis por la pandemia del coronavirus, la planificación permanente y la apuesta al multilateralismo, según el economista y sinólogo argentino Gustavo Girado.
El director del posgrado sobre Estudios de China Contemporánea de la Universidad Nacional de Lanús (UNLA) destacó el crecimiento del 2,3 por ciento interanual en el PIB chino luego de anotar un aumento del 6,5 por ciento interanual en el cuarto trimestre.
"Es un hecho que claramente demuestra que la planificación es muy necesaria en un mundo tan desequilibrado y con tantas dificultades para organizar su funcionamiento. Es destacable este crecimiento porque, en medio de la crisis, mientras algunas economías se cerraban para salvarse autónomamente, China y otros países asumían compromisos globales", dijo en entrevista con Xinhua.
Con este dato, "China reafirma la voluntad de mantener la dinámica global y su compromiso con el resto del mundo", continuó.
Girado indicó que el incremento en el nivel del PIB se explica por las medidas del Gobierno chino orientadas a estimular la demanda agregada "por el lado del consumo, la inversión doméstica, y no tanto del sector externo".
"China ha crecido especialmente en los dos últimos trimestres del año pasado, porque aplicó muchas de esas políticas para estimular la inversión local y el consumo interno en lugar de recomponer las cadenas globales de valor que dependían a su vez de la recomposición en el nivel de actividad de América del Norte y de la Unión Europea, algo que no ha sucedido", señaló.
Agregó que a pesar del cierre de ciudades y provincias, el país asiático logró que no se frenara el consumo, la distribución ni la comercialización de productos al interior del país, a la vez que protegió los ingresos de las familias.
"China pudo mantener eso, y luego de un primer trimestre bastante negativo, era altamente probable que el país comenzara a recomponer su actividad para el segundo", dijo.
El economista destacó medidas del Gobierno chino en medio de la pandemia de COVID-19, como el aumento de gasto fiscal, desgravaciones impositivas, recortes en las tasas de crédito y planes de inversión pública.
"Son destacables los planes de inversión pública que han cobrado notoriedad con los ferrocarriles, también con la distribución de productos a través de las cadenas de comercialización que van por las rutas, que también se enmarcan en la Iniciativa de la Franja y la Ruta, logrando conectar con el centro y el oeste de China, las zonas donde el ingreso per cápita es menor", puntualizó.
"También se estimularon los servicios aero-comerciales domésticos y no tanto los internacionales, también hay mucho de la inversión vinculado con la construcción que tuvo un estímulo muy especial", refirió el también profesor en la Universidad de Buenos Aires (UBA).
Para Girado, de mantenerse este ritmo de recuperación, hacia finales de este 2021 el mundo podría evidenciar otro repunte de la economía del país asiático, impulsado, sobre todo, por un "buen manejo de la pandemia, para lo cual China ha desarrollado capacidades especiales".
