Por Cristóbal Chávez Bravo
Imagen sin fechar y sin ubicación cedida por la Universidad de Chile de nectarinas de la línea "Andes Nec, fruta de piel roja y de "muy buen sabor" que resiste en óptimas condiciones viajes de 35 a 40 días. Un grupo de científicos chilenos creó nuevas variedades de frutas originarias del país, entre ellas nectarinas, frambuesas y uvas, que soportan largos viajes y mantienen su calidad, sin ningún proceso transgénico. (Xinhua/Universidad de Chile)
SANTIAGO, 12 ene (Xinhua) -- Un grupo de científicos chilenos creó nuevas variedades de frutas originarias del país, entre ellas nectarinas, frambuesas y uvas, que soportan largos viajes y mantienen su calidad, sin ningún proceso transgénico.
"Chile es un país exportador de frutas, por lo tanto, su fruta requiere que se mantenga en buenas condiciones, de calidad sensorial por un período muy largo, 30 o 40 días para llegar a mercados lejanos", explicó a Xinhua el académico de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile (UCH), Rodrigo Infante.
El experto precisó que ese tipo de variedad no existía en el mundo y que los duraznos, por ejemplo, que Chile antiguamente exportaba fueron desarrollados en otros países, con otras condiciones y necesidades.
Por esta razón, la Corporación de Fomento de la Producción de Chile creó hace 15 años "Programas y Consorcios Tecnológicos Estratégicos" en los que han logrado vincular a empresas, universidades e institutos de investigación que, a la fecha, han desarrollado mejoras genéticas a nectarinas, uvas y frambuesas.
Infante explicó que en el proyecto de la UCH comenzaron a evaluar las variedades que existían en el país poniéndolas en cámaras de frío para simular el transporte al puerto de destino.
"Nosotros fuimos seleccionando aquellas variedades que tenían un mejor desempeño en postcosecha y esas comenzamos a cruzarlas. Y después, en un cruzamiento, en una temporada tenemos 4.000 o 5.000 individuos que son hijos de cruzamientos. Se forman verdaderas familias", explicó sobre el cruzamiento de nectarinos, el árbol que produce la nectarina.
El ingeniero agrónomo abundó que cada familia tiene entre 100 a 150 individuos y estos son cultivados para producir la fruta.
"Después esa fruta tenemos que evaluar para saber si supera las características de los padres, que eso es lo que buscamos. No solamente que tengan una larga postcosecha, sino que (...) sean muy ricas de comer, jugosas, firmes", complementó.
Infante destacó los desarrollos que han tenido con nectarinas, frutos muy atractivos en el mercado asiático. Han creado seis variedades de esta fruta que están siendo cultivados en Chile y que "se han exportado de manera importante".
Actualmente, el 25 por ciento de las plantas de nectarinas vendidas en Chile son de la línea "Andes Nec", una serie de nectarinas de piel roja y de "muy buen sabor" que resisten en óptimas condiciones viajes de 35 a 40 días.
Remarcó que es un programa de genética convencional y que "no nos basamos en transgenia y otras tecnologías, sino que cruzamos individuos y obtenemos la descendencia de los mejores individuos".
El académico enfatizó que son variedades chilenas, cuyo dueño es la Universidad de Chile, la universidad estatal más importante del país.
"Llevamos 22 años trabajando en esto y fuimos los pioneros", dijo con orgullo.
"Con la exportación de variedades chilenas lo que nosotros también podemos exportar es conocimiento", alentó.
Por su parte, Rodrigo Cruzat, gerente del Consorcio Biofrutales, remarcó en entrevista con Xinhua que la industria agrícola es la segunda más importante en el país, después de la minera; sin embargo, "ni la uva, durazno, manzana, naranja ni ninguna era originaria de Chile".
Explicó que para una variedad frutal en Chile es crucial la postcosecha puesto que para llegar a Estados Unidos se requieren 15 días en barco, para Europa 25 días y para China entre 40 y 45 días por la misma vía marítima.
"Para un durazno y una nectarina ese viaje, ese desafío, es muy grande, y muchos no lo logran, no llegan bien. Pueden llegar podridos, harinosos, que no tienen jugo, y eso ocurre durante el viaje", dijo.
Para Cruzat, este programa es un gran avance. "Habla de una industria que va un paso más allá. No es exportar cátodos de cobre, sino exportar cables, tecnología con cobre. Sin dudas que estamos exportando conocimiento, ciencia", alentó al compararlo con la industria cuprífera, la más importante en el país sudamericano.
En los programas multidisciplinarios también destacan las variedades de frambuesas "Santas" creadas por la Universidad Católica de Chile y el Consorcio Tecnológico de la Fruta.
O también "Maylen", una variedad de uva de mesa negra, desarrollada por el Instituto de Investigaciones Agropecuarias de Chile junto al Consorcio Biofrutales, que se jacta de no tener semilla, sabor dulce y excelente vida de postcosecha, puesto que puede permanecer hasta 90 días en frío en perfectas condiciones.
Estas "variedades chilenas" son comparables a las manzanas "Pink Lady" australianas o a la uva "Red Globe" californiana.
Según los datos de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile AG, difundidos en noviembre pasado, las exportaciones de frutas frescas del país cerraron con un volumen de 2.537.079 toneladas enviadas a los diferentes mercados del mundo, correspondientes a la temporada 2019-2020.