Por Sylvia B. Zárate
BOGOTA, 31 dic (Xinhua) -- Colombia cierra el 2020 con una serie de medidas restrictivas en las principales ciudades, como toques de queda extendidos y Ley Seca en varios municipios, debido al acelerado aumento de contagios y muertes por la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19) en el último mes.
El gobierno reportó hoy 1.642.775 casos acumulados y 43.213 muertes por la COVID-19 en el país, que comenzó el segundo pico tras el primero registrado entre julio y agosto, luego de que el primer caso positivo se detectó en marzo.
A pesar de las medidas tomadas en los últimos días, las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) del país comenzaron a mostrar una ocupación acelerada que llevó a la Asociación Colombiana de Medicina Crítica y Cuidados Intensivos (AMCI) a hacer un llamado urgente al país esta semana.
En entrevista con Xinhua, el presidente de la AMCI, José Luis Accini, dijo que Colombia experimenta una crisis en la red de UCI por varios factores, los cuales en su opinión deben ser conocidos por los ciudadanos para que al inicio de 2021 no bajen la guardia en las medidas de autocuidado.
El especialista señaló que aglomeraciones como las que se vieron el pasado fin de semana en las ciudades de Bogotá y Cali durante la final del fútbol colombiano no pueden repetirse en medio de una pandemia que cobra tantas vidas.
El gobierno previó un aumento de casos por la COVID-19 y un mayor número de ingresos a las UCI en diciembre; sin embargo, la situación de emergencia se ha visto "acentuada, magnificada por los sucesos de Cali, de Bogotá y de Medellín del fin de semana anterior", puntualizó.
Agregó que aunque Colombia todavía cuenta en teoría unas 4.000 UCI disponibles, existen limitantes para su aprovechamiento, como la falta de medicamentos y sobre todo el estado del personal médico especializado.
"Gente cansada, algunos se han retirado, han renunciado, otros enfermos, es decir que esto le agrega más problemas a la limitante que teníamos desde el comienzo de la pandemia, de que un talento humano preparado, competente, con experticia para el manejo de la patología crítica asociada a COVID -19 ya de por sí era complicado", precisó.
Accini resaltó que además en UCI de varias instituciones de reporta la carencia de medicamentos como sedantes que son indispensables para el manejo de pacientes críticos que están llenando las camas.
"Logramos superar ligeramente y de manera transitoria el tema de los analgésicos y el de los relajantes neuromusculares, pero con una alta presión en el ingreso de pacientes al cuidado crítico, como está sucediendo en Bogotá pues ya muchas instituciones ya están con 100 por ciento de ocupación", explicó.
Accini insistió en que es urgente que la ciudadanía sea coherente con la situación real que se vive en el país y con el riesgo que miles de personas tienen de perder la vida como consecuencia del virus.
"En una población que es menor pero significativa para el número de casos, llegan graves a cuidado intensivo con una mortalidad que oscila entre el 25 y el 50 por ciento o más, dependiendo de la gravedad con la que estos pacientes llegan a la UCI", alertó.
"Los que salen vivos salen con secuelas y quedan con síntomas y manifestaciones que demoran tiempo para mejorar, algunos con un deterioro marcado en su capacidad funcional y su calidad de vida", agregó.
El médico subrayó que si bien la llegada de la vacuna contra la COVID-19 es una luz de esperanza para la humanidad, todavía se deben mantener las medidas de autocuidado para evitar los contagios.
"Con la vacuna es posible que las cosas puedan cambiar y la vida pueda llegar a ser no como antes, porque quedarán algunos asuntos científicos no resueltos y algunos aspectos biológicos no conocidos, no resueltos", indicó.
Recordó el comportamiento natural de los virus de cambiar su forma y que las mutaciones que habitualmente se dan no pertenecen a ninguna localidad geográfica, por lo que se debe estar preparados para estas nuevas variantes y mantener el autocuidado.
"Así que la incertidumbre que plantea todo esto nos indica que no todo está resuelto y que aún con la vacuna guardamos esperanzas de que las cosas van a llegar a un punto mucho más manejable, cuando las Unidades de Cuidado Intensivo terminen de tener esa alta presión que han tenido", indicó.
Accini también hizo énfasis en la necesidad de que los gobernantes tomen acciones a tiempo para evitar que colapse el sistema hospitalario del país, uno de los más afectados por la pandemia en América Latina.
"Lo otro es lo que tiene que ver con las respuestas de gobernantes a la forma como viene dándose la situación epidemiológica, si ya tienen 70 por ciento de camas de Unidades de Cuidado Intensivo ocupadas pues no debe permitir que se realicen actividades que potencialmente llamen a la aglomeración", opinó.
El médico advirtió sobre la aglomeración que puede presentarse la noche de este jueves en la ciudad de Barranquilla, donde el artista Silvestre Dangond anunció un concierto en el monumento La Ventana Abierta durante la noche de Año Nuevo.
Aunque el concierto será virtual, el anuncio del lugar y la hora en donde se realizará el concierto prendió las alarmas de la comunidad médica que preven un posible contagio masivo.
"El palo no está para cucharas (...) Este es el mensaje que desde la terapia intensiva y cuidado crítico hemos presentado de una manera preocupante, hablamos de una agnosia social que significa no interpretar los hechos, no generar conciencia de la situación en la que estamos", añadió.
Este 31 de diciembre Bogotá, que se mantiene a la cabeza de regiones con más casos y muertes por la COVID-19, reportó 81,8 por ciento de ocupación en las UCI.
Medellín, por su parte, reportó un 87 por ciento, Cali alcanzó un 91 por ciento y ya han comenzado a trasladarse pacientes a hospitales en departamentos como Risarlada, que en las últimas horas anunció la saturación de camas de UCI.
El Ministerio de Salud informó el miércoles que en enero puede elevarse el número de casos y muertes por la pandemia, debido al relajamiento en las medidas de autocuidado de la población durante las festividades de fin de año.
Por su parte, el presidente Iván Duque anunció el pasado 21 de diciembre que en febrero comenzará la vacunación masiva contra la COVID-19.
