SANTIAGO, 26 nov (Xinhua) -- El Instituto Confucio de la Universidad Santo Tomás (UST) de Chile celebró hoy jueves su 13° aniversario en una ceremonia virtual, en la que se conmemoraron además los 50 años del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Chile, y en la que se valoró la difusión del idioma y la cultura entre ambos países.
"China llega a Chile a través del Instituto Confucio y estamos orgullosos de ser parte de este puente", señaló en su discurso inaugural la rectora de la Universidad Santo Tomás, María Olivia Recart, quien destacó los logros alcanzados en materia de intercambio cultural y académico con el país asiático en la última década.
En 2007 las universidades Santo Tomás y Anhui (de China) firmaron una alianza que significó la creación del primer Instituto Confucio en Chile, por el que han pasado más de 11.000 estudiantes en diferentes cursos de aprendizaje del idioma y la cultura china.
Hasta la fecha, más de 300 personas han tenido la oportunidad de viajar a China, a través de campamentos, concursos y giras estudiantiles, entre otras iniciativas culturales dedicadas al entendimiento mutuo, que han albergado a más de 500.000 interesados.
En 2020, el Instituto Confucio Santo Tomás debió adaptar su modalidad debido a la pandemia y se volcó a las clases virtuales, logrando duplicar sus matrículas de 799, en 2019, a 1.630, con alumnos distribuidos a lo largo de todo el país austral y docentes conectados desde diversas ciudades del mundo.
En el encuentro virtual de este jueves participó el ex presidente y embajador plenipotenciario de Chile para la región Asia-Pacífico, Eduardo Frei, quien abordó en una exposición "el boom de las inversiones chinas en Chile", en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta y los avances logrados entre ambos países socios en medio siglo de relaciones diplomáticas.
"Tenemos la satisfacción de decir hoy que China es uno de los principales inversores de Chile de todo el mundo", dijo Frei, a la vez que afirmó que "la gran posibilidad de Chile de conectarse con Asia y China a través del Pacífico Sur es el desarrollo de la infraestructura necesaria para ser parte del nuevo mundo".
En este contexto, subrayó que "participar activamente en la Iniciativa de la Franja y la Ruta y desarrollar proyectos monumentales dará a Chile otro estatus en materia de conectividad", por lo que instó a superar la barrera del idioma y las diferencias culturales, "para lo que los Institutos Confucio han sido monumentales".
Lo siguió el embajador chileno en China, Luis Schmidt, quien enumeró en su presentación las diversas oportunidades de comercio que existen actualmente con el país asiático, cuya recuperación pospandemia contribuirá a levantar la economía chilena, indicó.
"China es nuestro primer socio comercial desde 2010 y hoy casi dobla a nuestro segundo socio comercial que es Estados Unidos. A octubre de este año, China representó casi un 37 por ciento de todas las exportaciones de Chile", explicó el diplomático.
El ex embajador chileno en China, Fernando Reyes Matta, saludó el medio centenar de lazos ininterrumpidos entre los dos países y llamó a forjar a futuro "una relación importante, fuerte y fundamental, con inversiones, intereses compartidos y ganancias posibles para ambos lados", en un planeta en el que "las distancias van a ir desapareciendo cada vez más".
En esta línea, la tarea del país sudamericano "es entender cómo China se va moviendo en sí misma y, al mismo tiempo, al ser actor fundamental en el escenario internacional que viene, cómo actúa su discurso, su visión del mundo, para desde allí construir una capacidad de interacción de Chile con China hacia adelante, en un mundo mucho más interconectado", declaró también el director del Centro de Estudios Latinoamericanos sobre China de la Universidad Andrés Bello de Chile.
En la actividad intervino la consejera cultural de la Embajada de China en Chile, Yang Changqing, quien valoró que en 50 años las relaciones bilaterales "han experimentado un expedito desarrollo en los ámbitos político, económico-comercial, cultural y educativo, consiguiendo grandes logros que benefician a los dos pueblos".
Yang sostuvo que el intercambio cultural y académico es "la base fundamental" para el entendimiento mutuo entre diferentes países.
Rememoró las primeras visitas de artistas e intelectuales chilenos a China en la década de 1950, como el poeta Pablo Neruda y el pintor José Venturelli, previo al establecimiento de vínculos diplomáticos bajo el gobierno del entonces presidente Salvador Allende, en 1970.
Participaron también en esta ceremonia virtual el académico y ex director de la oficina comercial chilena en Beijing, Mario Artaza; el director del Centro Regional de Institutos Confucio para América Latina, con sede en Santiago, Roberto Lafontaine, y el presidente del Consejo de la Universidad de Anhui, Cai Jingmin.
En tanto, la moderación estuvo a cargo de la directora ejecutiva del Instituto Confucio de la Universidad Santo Tomás, Lilian Espinoza, y la directora académica de la misma casa de estudios, Wang Meng.
