JINAN, 3 sep (Xinhua) -- Un museo construido en un antiguo campo de concentración de la Segunda Guerra Mundial, ubicado en el este de China, abrió sus puertas hoy jueves con motivo del 75º aniversario de la victoria en la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa y la Segunda Guerra Mundial.
El campo de concentración de Weihsien, ubicado en la ciudad de Weifang, en la provincia de Shandong, fue utilizado por los invasores japoneses entre marzo de 1942 y agosto de 1945 para encarcelar a más de 2.000 expatriados.
Las personas apresadas provenían de Estados Unidos, Reino Unido y Canadá, entre otros paíeses, e incluían más de 300 niños.
Weihsien, también escrito como Weixian, es el antiguo nombre de la zona urbana de Weifang.
El museo exhibe lámparas de queroseno, calderos, relojes y otros artículos utilizados por los internos, así como moldes de sus manos y las de sus descendientes.
"El campo de concentración constituye un testimonio de la historia, ya que cuenta la agresión japonesa y la persecución contra los ciudadanos de los países occidentales", indicó Ji Shuchun, curador del Museo de Weifang y también del museo del campo de concentración de Weihsien.
En 1882, los estadounidenses construyeron en el lugar un complejo denominado "Patio del Camino Feliz", el cual sirvió como iglesia, hospital y escuela por décadas.
Durante la Segunda Guerra Mundial, los japoneses convirtieron el complejo en un campo de concentración para encarcelar a los occidentales, quienes anteriormente vivían en áreas como Beijing, Tianjin, Shandong y Henan.
El campamento fue liberado por un equipo de rescate enviado por las tropas estadounidenses en China, quienes llegaron al sitio con paracaídas el 17 de agosto de 1945, dos días después de la rendición de Japón.